La nueva serie de Televisión Española, "Malaka", es un thriller "crudo y duro" que "da una vuelta de tuerca" al género tradicional al convertirse en una historia de personajes oscuros y con aristas en una Málaga que muestra los bajos fondos de la droga y el brillo de la alta sociedad de la ciudad.

Así ha resumido el director de la serie, Marc Vigil ("El Ministerio del tiempo") la historia que los espectadores de TVE podrán ver a lo largo de ocho capítulos de sesenta minutos de duración para los que aún no hay fecha de estreno.

En la jornada inaugural del Festival de Televisión de Vitoria, FesTVal, TVE ha presentado su gran apuesta de ficción para esta nueva temporada, que ha producido junto con Globomedia, tras tomar impulso en los Laboratorios de la Fundación SGAE.

El elenco está encabezado por Maggie Civantos, que encarna a una inspectora que, tras desarrollar su carrera en Madrid, regresa a su Málaga natal, donde debe investigar la desaparición de la hija de un conocido empresario.

Su compañero será Salva Reina, en la piel de un policía que se mueve hábilmente en los barrios más duros de la ciudad y que roza la frontera de la corrupción mientras trata de mantener controlado el mercado de la droga.

El trío protagonista lo completa un detective privado (Vicente Romero) que tuvo que dejar la Policía por un turbio asunto del que prefiere no hablar.

Los tres colaborarán para esclarecer la desaparición de la joven, que coincide con la irrupción de una nueva droga que desata una guerra entre bandas en Málaga, ciudad en la que se ha rodado la serie, que es "un personaje más" y que sirve para mostrar el brillo de la alta sociedad y el submundo que genera la droga.

El reparto se completa con un amplio elenco de actores, muchos de ellos andaluces, como Cuca Escribano, Antonio Gil, Susana Córdoba y Alejandro Casaseca, entre otros, que muestran un paisaje humano que abarca desde hombres de negocios y jóvenes adinerados a campos de clanes mafiosos y delincuentes de poca monta.

Los creadores del proyecto, Daniel Corpas y Samuel Pinazo, tuvieron la idea de la serie en el verano de 2015 cuando observaron mientras tomaban unas cañas cómo los turistas visitaban Málaga ajenos a que a escasos metros de los lugares más conocidos hay barrios duros, que quedan fuera de las guías de viaje.

Con ese "chispazo inicial" desarrollaron un guión "naturalista, realista, que buscaba la verdad" en el que los silencios y el ritmo pausado da lugar a "una historia de personajes muy potentes".

Es una serie que "habla de emociones y de personajes, pero también muestra de una parte de la sociedad que nunca queremos ver" y por ello "no busca ser cómoda", ha resumido el productor ejecutivo Javier Olivares, que tuteló el proyecto en la SGAE para que diera el salto al rodaje.

En la misma línea, Salva Reina, ha subrayado que "Malaka" es una historia "muy cruda" con personajes "llenos de oscuridad, abismos y problemas", lo que por otra parte ha disfrutado desde el punto de vista interpretativo.

También Maggie Civantos ha puesto de relieve la complejidad de los personajes y ha valorado el ritmo de la narración, que da protagonismo a "los silencios y al subtexto", lo que permite "ser muy fiel a la psicología de los personajes".

"Malaka", nombre con que los fenicios fundaron Málaga en el 700 A.C., tiene un final cerrado que desvela "cómo, quién, por qué y cuándo". Sin embargo, el director de Contenidos de TVE, Fernando López Puig, no ha cerrado la puerta a una segunda entrega porque, según ha explicado, todas las series son susceptibles de continuar si logran el respaldo del público.