Los sindicatos CCOO y UGT han pedido este domingo que el Gobierno delimite los servicios esenciales y de servicio público postal de Correos al 25 % de la plantilla, de modo que se concilie la prestación necesaria con la mínima exposición de los trabajadores.

Para ello, según los sindicatos, el presidente de Correos, Juan Manuel Serrano, debe sustituir las actuales instrucciones operativas que han sumido a la compañía "en un caos organizativo sin precedentes", por otras, que concilien ambos intereses, el de prestación de servicio público con protección de la salud de la plantilla.

CCOO y UGT han vuelto a reiterar, en un comunicado, que la prestación de los servicios esenciales debe realizarse con la máxima protección mediante equipos individuales y colectivos de protección y las medidas que garanticen la seguridad de los trabajadores, de lo contrario, Correos "debe paralizar su actividad allá donde se incumplan".

Ambas organizaciones han transmitido al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, mediante carta previa a la celebración del Consejo de Ministros, para que en el real decreto que se aprobará hoy, establezca los criterios de prestación del Servicio Postal Universal.

De acuerdo con los sindicatos, el presidente de Correos "se negó" a definirlos en las instrucciones internas que remitió el pasado 15 de marzo, "provocando un caos sin precedentes en la gestión de la compañía pública".

CCOO y UGT consideran que el correo público, como la sanidad, los transportes o los bomberos y otros servicios públicos, "puede desempeñar un papel relevante para que los ciudadanos pasen su confinamiento obligado y necesario en las mejores condiciones posibles".

A su juicio, la aprobación del real decreto de hoy puede ser "una extraordinaria oportunidad" para reorientar la situación y colocar a Correos, como servicio público, "a la altura" de la situación de emergencia que vive el país.