El Gobierno de Costa Rica insistió este miércoles al resto de países centroamericanos que se unan a un plan piloto sanitario que ha echado a andar con Panamá para el transporte de carga que proteja la salud de los conductores y de la población de la región en medio de la pandemia del COVID-19.

La ministra de Comercio Exterior de Costa Rica, Dyalá Jiménez, afirmó en la conferencia que su país ha aplicado restricciones a los transportistas extranjeros para prevenir una escalada de contagios del COVID-19, lo que obliga a buscar soluciones "innovadoras" que garanticen el flujo comercial y la protección sanitaria.

Tras 9 días de cierre, el martes los transportistas de Panamá desbloquearon Paso Canoas, el principal puesto fronterizo con Costa Rica, luego de que el Gobierno panameño decidiera aplicar medidas recíprocas a los transportistas costarricenses, por ejemplo descargar en almacenes fiscales y permanecer en suelo panameño 72 horas como máximo.

Hace una semana los Gobiernos de Costa Rica y Panamá alcanzaron un acuerdo que establece una ruta sanitaria que permite a los transportistas panameños estar en territorio costarricense por 72 horas para entregar producto en almacenes fiscales, descansar, levantar carga y regresar a su país. El trayecto es seguido por medio de GPS.

La ministra Jiménez dijo que al menos 40 camiones han ingresado a Costa Rica desde la reapertura de la frontera con Panamá.

Este miércoles Honduras también comenzó a aplicar una medida recíproca que da 72 horas de estadía a los conductores costarricenses, pero además no permitirá el registro e inicio en Honduras de las Declaraciones Únicas Centroamericanas de Tránsito (DUCA-T), con destino a Costa Rica con códigos de transportistas diferentes al de Honduras.

La ministra costarricense declaró que las medidas recíprocas son una oportunidad para "comenzar a probar planes pilotos que nos permitan el flujo comercial y convivir con la pandemia".

El 18 de mayo Costa Rica comenzó a restringir el ingreso de transportistas extranjeros tras detectar 50 casos de COVID-19 en estos conductores, la mayoría en la frontera con Nicaragua, un país que ha sido criticado por tomar pocas medidas preventivas frente a la pandemia y que según la OMS se encuentra en fase de transmisión comunitaria.

El ministro costarricense de Salud, Daniel Salas, reconoció este miércoles que el nivel de contagio en Nicaragua es en la actualidad el "principal riesgo sanitario" para Costa Rica.

LAS POLÉMICAS MEDIDAS SANITARIAS DE COSTA RICA

Desde el 18 de mayo Costa Rica, país que ha mantenido la transmisión del virus bajo control, estableció que los únicos conductores extranjeros que pueden ingresar al país son los que no entregan carga en este país, sino los que se trasladan desde la frontera con Panamá hacia la frontera con Nicaragua y viceversa. Esos camiones deben moverse en caravanas escoltadas por la policía.

Para el resto, Costa Rica estipuló que deben desenganchar la carga en la frontera y entregarla a un camión costarricense o de un residente; o bien desinfectar el camión y entregarlo a un chófer local o residente.

Tras las inconformidad que esto generó en la región, los transportistas panameños cerraron el paso en su lado de la frontera.

El Gobierno nicaragüense mantiene cerrados sus puestos fronterizos con Costa Rica como protesta y hay kilométricas filas de camiones en ambos países.

Como solución Costa Rica y Panamá acordaron la ruta sanitaria seguida por GPS y con un tiempo límite de estadía en el país, una modalidad que las autoridades costarricenses esperan sea acogida por el resto de países de la región.