Apuesta por el ladrillo, empresas controladas por sociedades panameñas vinculadas a testaferros de Rodrigo Rato y la discreción marca de la casa. Son algunas señas de identidad de los negocios en España de los hermanos Luis y Mauricio Amodio Herrera, los millonarios mexicanos que acaban de convertirse en nuevos accionistas de referencia de OHL.

Los Amodio, como otras grandes fortunas españolas y extranjeras, han aprovechado la sangría bursátil de la crisis del coronavirus para invertir en una gran cotizada española. Tras descartar una fusión con la empresa española, han aprovechado la debilidad del Grupo Villar Mir para adquirir al grupo del octogenario exministro Juan Miguel Villar Mir un 25% de OHL, con la opción de tomar otro 9% hasta noviembre.

Son ya los primeros accionistas de la emblemática constructora, cuyo prestigio se han propuesto recuperar tras años de escándalos de corrupción vinculados al PP. Ahora se espera que lleven a cabo una profunda reestructuración de su deuda. OHL estaba al borde de la quiebra y acaba de renegociar con la banca casi 600 millones de euros en bonos que vencen entre 2022 y 2023. 

Estos dos hermanos, ingenieros de formación, son los dueños de la constructora mexicana Caabsa, una compañía de propiedad familiar (no cotiza en bolsa) y fundada hace 40 años que en su web se define como "un grupo conformado por múltiples empresas, cien por ciento mexicanas, con más de seis mil colaboradores y presencia internacional". 

Especializada en desarrollos de lujo en la capital mexicana, Caabsa creció en su país a la sombra del PRI, el partido que dominó la vida política de México durante más de medio siglo. Ahora va a expandir su presencia en España, donde los Amodio, que gustan del perfil bajo, no son unos recién llegados.

Su rastro y el de Caabsa está presente aquí desde hace casi 20 años a través de sociedades como Grupo Constructor Aboumrad Amondio Berho SL, creada en 2003 y aparentemente inactiva, o Integración de Negocios Inmobiliarios SL, cuyas últimas cuentas son de 2013 y que tampoco parece tener actividad. 

De más reciente creación son Edicon Spain SL, Brik Patentes y Marcas SL, Macon Spain SL o Aco Patentes y Marcas SL, que tienen varios puntos en común: todas iniciaron sus operaciones el mismo día (10 de julio de 2012), son propiedad de firmas panameñas creadas también de una tacada (el 6 de marzo de 2012), tienen el mismo administrador y guardan vinculación con las empresas del grupo Amodio. 

Según documentación oficial, las dueñas panameñas de esas empresas españolas tienen los mismos administradores y los suscriptores de sus acciones en el momento de crearse son dos personas, Dianeth de Ospino y José Eugenio Silva Ritter, que administran centenares de empresas en Panamá y que ejercieron como presuntos testaferros de una sociedad de Rodrigo Rato en ese país, Walden Enterprises Inc.

Esta empresa fue traladada a España en 2013 por la hermana del expresidente de Bankia, la anticuaria Ángeles Rato, meses después de la amnistía fiscal del exvicepresidente del Gobierno y ex director gerente del FMI. 

De Ospino y Silva fueron también relacionados en medios latinoamericanos con el entramado empresarial de Fabricio Correa, hermano del presidente ecuatoriano Rafael Correa, recientemente condenado por corrupción en su país, y ocupaban también cargos en las empresas offshore de la red Lava Jato en Brasil. 

20 millones en activos

De esas firmas españolas vinculadas a los Amodio y controladas desde Panamá, la que más activos tiene, 19,8 millones de euros, según sus últimas cuentas disponibles (2016) es Edicon Spain SL. Domiciliada, como el resto, en un despacho de asesoría fiscal en Madrid (calle Alberto Alcocer, 46), su socio único es la panameña Larnac Trading Corp. En sus cuentas, explica que es dueña de "distinta propiedad industrial" adquirida "dentro de su política de implantación en el mercado europeo a través de la adquisición de distintas marcas para su posterior desarrollo".

Se trata de marcas del grupo Caabsa como Construbosques, Guadalajara Caabsa Eagle, Construcaabsa o Expomahe.

Un experto fiscalista aventura una posible explicación para que una empresa mexicana sin apenas presencia en España otorgue una valoración millonaria a marcas que detentan sociedades españolas: que estas últimas le cedan el uso de esos derechos a una tercera empresa en México, de forma que, en virtud de una exención recogida en una reforma legal de la Ley del Impuesto de Sociedades de 2013, "ese canon se reduce en España en un 60% por el régimen de patent box y se deducen íntegros como gasto en México". 

Los Amodio, cuyos portavoces en España no han respondido a las preguntas sobre su relación con esas empresas panameñas, tienen como persona de confianza para sus proyectos en España a José Antonio García de Vinuesa Boville. Este español es el administrador único de la mayoría de esas firmas españolas vinculadas a Caabsa y controladas desde Panamá y está vinculado a la mayoría de las empresas de los Amodio en España.

José García de Vinuesa, que según una persona que trabajó en uno de sus proyectos en Madrid está emparentado con el anterior alcalde del PP en Alcobendas (Madrid), Ignacio García de Vinuesa, aparece definido en la web de la firma de asesoría ATD como un consultor que "ha dirigido empresas en diversos países y sectores empresariales", con formación en ICADE y MBA y "amplia experiencia en procesos financieros e intermediación".

Una de las empresas que administra García de Vinuesa, que no ha querido atender a eldiario.es, es Fusión de Ideas España Desarrollo Inmobiliario, constituida en 2014 y que en sus últimas cuentas (2018) tenía 12,38 millones en activos (la mayor parte, inmuebles).  

Esta empresa, que varios medios han relacionado con los Amodio, figuraba como titular de la extinta web de Factor Auto, que proyectó abrir en la Comunidad de Madrid un centro comercial especializado en la compraventa de coches kilómetro cero, primero en Leganés (en un centro comercial abandonado que acabó comprando el grupo venezolano Sambil), después en Ciudad de la Imagen (Pozuelo de Alarcón) y más tarde en Alcorcón.

El proyecto tampoco fraguó en esa localidad del cinturón sur de Madrid, pese a que varios medios anunciaron a finales de 2014 su inminente apertura en el centro comercial Parque Oeste. Según anunció entonces Vinuesa en una nota de prensa, preveía contar con más de 3.500 vehículos de kilómetro 0 de las principales marcas en exposición permanente y contaba con el apoyo de un fondo de inversión mexicano, FIE, dirigido por él, y que iba a invertir 15 millones de euros para acondicionar las instalaciones.

"La idea era que tú llevabas tu coche usado, te lo compraban y te llevas uno nuevo en cuestión de una hora", recuerda una persona que colaboró en el proyecto y que asegura que tras él estaban los Amodio. Un extremo que el promotor de la idea original, el empresario español Alberto Narbona, dice desconocer: "No les he visto en mi vida", asegura, en conversación telefónica.