El consejero delegado de Endesa, José Bogas, apoya que el Gobierno regule el teletrabajo, pero confía en que no se imponga como una obligación para las empresas, que deberían tener la libertad de ofrecerlo de forma voluntaria, aunque asegura que en su compañía sí se implantará de una manera generalizada.

"Como todas las cosas en la vida, el teletrabajo tendrá que tener una regulación", pero "no puede ser una obligación", sino "algo que cada empresa ofrezca siempre que se pueda llevar a cabo o se tenga capacidad; algo voluntario", ha apuntado Bogas, que en esta incipiente y "todavía extraña" nueva normalidad, sólo va a la oficina una o dos veces por semana y sólo por la mañana.

El Gobierno asegura estar ya negociando borradores con patronal y sindicatos para regular los criterios que deben regir el teletrabajo, como el pago de los gastos que conlleve o las horas que debe cumplir el empleado.

Según la memoria del anteproyecto de ley al que ha tenido acceso Efe, la norma tendrá efectos positivos en la economía ya que es una forma de trabajo que supone un ahorro de tiempo, que puede contribuir a la lucha contra la contaminación y que puede tener virtualidad incluso para revitalizar los núcleos de población rural.

En una entrevista con Efe, Bogas dice estar "satisfecho" con cómo se han superado los meses de confinamiento en Endesa y celebra que "han sido pocos los contagios" entre la plantilla (151 casos confirmados, el 1,7 %), aunque lamenta el fallecimiento de un trabajador.

"El teletrabajo ha funcionado mejor de lo que esperábamos", ha explicado. De 9.500 personas. 7.000 han teletrabajado y 2.500 tenían que acudir presencialmente a centrales, centros de control u otras instalaciones.

Para facilitar el teletrabajo, "ha habido que cambiar muchas cosas": "Cuando ésto se empezaba a alargar, se empezó a facilitar que la gente se lleve su silla a su casa, el ratón, la pantalla, para hacerlo todo un poquito más cómodo".

"Cuando se nos da responsabilidad y controlamos nosotros las cosas, creo que adquirimos más compromiso y eficiencia", explica Bogas, convencido de que los trabajadores, al verse más dueños de su tiempo, "se han organizado" y "se han hecho mucho más responsables y productivos".

Sin embargo, apunta que este fenómeno ha ocurrido durante el periodo de confinamiento. "No sé si prolongándose en el tiempo sería igual la sensación o no".

"Efectivamente se puede trabajar desde casa. Tendríamos que aplicarlo en el futuro de la empresa, si bien creo que no es bueno estar todo el tiempo fuera", apunta Bogas para confirmar que Endesa sí se plantea el teletrabajo de una manera mucho más generalizada.

En ese sentido, aboga por instaurar un sistema mixto que implique acudir a la oficina un par de días a la semana, porque "el contacto personal es importante", al igual que el "sentido de pertenencia".

Ello implicará a su vez cambios en las oficinas, con más espacios compartidos y sin sitios asignados, y un esfuerzo aún mayor en la digitalización de los procesos y en la capacitación de los trabajadores.