El Gobierno traslada al Banco de España su preocupación por los ERE y los sueldos de banqueros y le insta a actuar

Varios ministros del Ejecutivo de Pedro Sánchez han salido a criticar el anuncio de miles de despidos por parte de entidades financieras. La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha trasladado al Banco de España su preocupación sobre los sueldos y bonus de los altos ejecutivos de banca, especialmente en un escenario marcado por los fuertes ajustes de plantilla del sector, y ha apuntado que es el supervisor quien tiene un papel que jugar en primer lugar para encauzar el proceso de la manera más positiva para la economía en general.

"Creo que los salarios y bonus de los ejecutivos bancarios deben estar alineados con la evolución del sector y la economía en su conjunto", ha dicho en una videoconferencia con corresponsales extranjeros, según recogen Bloomberg y Reuters.

Este jueves se ha sabido que la dirección de BBVA ha planteado el despido de 3.798 personas y el cierre de 530 oficinas. Los despidos de BBVA se suman al ERE anunciado también esta semana por CaixaBank, que supone el despido de 8.291 trabajadores y el cierre de 1.534 oficinas.

Se trata un mensaje similar al que ofreció el miércoles en declaraciones a los medios tras la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso, cuando aseguró que desde hace años el Gobierno trabaja activamente en alternativas para evitar los despidos y calificó de "inaceptables" los elevados sueldos y bonus que cobran los directivos de banca, que en su opinión "no se corresponden en absoluto" con la situación económica del país, especialmente en entidades que están anunciando fuertes recortes de personal y cierre de oficinas.

Fuentes del Ministerio de Economía consultadas por Europa Press confirman que, hablando de sueldos y ajustes de empleo, Calviño ha reconocido ante los medios extranjeros que el Gobierno ha trasladado esta preocupación al Banco de España y ha dicho que utilizará los instrumentos de los que dispone para encauzar el proceso de la mejor manera.

"Esta preocupación la hemos expresado al Banco de España y vamos a utilizar los instrumentos a nuestra disposición para tratar de encauzar este proceso de la manera que sea lo mejor posible para la evolución económica. Tendremos que utilizar los distintos instrumentos y, en primer lugar, creo que el Banco de España como supervisor del sector tiene un papel que jugar para encauzar este proceso de la manera más positiva desde el punto de vista de su impacto en la economía general de nuestro país", ha dicho Calviño.

Aunque la vicepresidenta de Asuntos Económicos traslade la responsabilidad al organismo supervisor también es cierto que los sindicatos UGT y CCOO le han pedido al Gobierno que emprenda acciones para reducir los despidos especialmente en Caixabank, donde el Estado cuenta con una participación accionarial del 16%.

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, señaló hace un mes en una entrevista al diario El Mundo que los despidos eran "inevitables" porque "hay un cierto exceso de capacidad" por lo que no son descartables nuevas fusiones en el sector financiero. Aunque también añadió que "es un objetivo de las políticas públicas garantizar el acceso a los servicios financieros" ya que la reducción de sucursales podría "generar algunos riesgos de exclusión".

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha afirmado este jueves que "no son tiempos" para "planteamientos" como los despidos anunciados durante las últimas semanas por varios bancos y ha remarcado que "todo el mundo debe remar en una única dirección" para garantizar el "mantenimiento del empleo".

"Creo que no son los tiempos de estos planteamientos. Me parece que todo el país, toda Europa está sufriendo y todo el mundo debe de remar en una única dirección, que es el mantenimiento del empleo", ha dicho en declaraciones a los medios en Bruselas antes de reunirse con el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis.

"He de decirles que creo que en este caso, si me permiten en nombre de Unidas Podemos, hace meses hemos anticipado ciertos riesgos en la fusión de Bankia (con Caixabank) que tienen que ver con el empleo y que lamentablemente estos días se daban a conocer", ha subrayado.

Por su parte, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha afirmado que entidades financieras como CaixaBank y BBVA deberían tener en cuenta las ayudas públicas que recibieron en la anterior crisis antes de acometer un ERE.

"Los dirigentes de las instituciones financieras deben ser conscientes de hasta qué punto se ha protegido al sector para evitar males mayores, y en esta situacion esa reflexión me parece particularmente relevante (...) Esa reflexión debería inspirar cualquier decisión empresarial", ha subrayado.

Escrivá ha recordado a las entidades financieras que su 'rescate' no sólo se manifestó a través de la limpieza de sus balances, sino también con una serie de ayudas públicas que deberían tener en cuenta a la hora de anunciar ajustes de plantilla.

El ministro confía en que estos ERE sean los últimos que se producen en el marco de un modelo antiguo de ajustes de empleo que debe transformarse y dar paso a mecanismos de flexibilidad interna inspirados en los actuales expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), tal y como está contemplado en el Plan de Recuperación.

Dichos mecanismos, ha subrayado, son más eficaces para abordar los procesos de transformación empresarial, más graduales y permiten reestructuraciones ordenadas en los que los vínculos con la empresa se mantienen.