Este año la invitación se hace abriendo las fronteras a Europa, lo que introduce literaturas en otras lenguas además de las cooficiales. El acto inaugural será un homenaje al poeta Antonio Gamoneda al mando de la también poeta Raquel Lanseros, que se realizará en el Teatro de la Abadía. La sede principal seguirá siendo el Círculo de Bellas Artes de Madrid, aunque conquistarán 31 sedes en la capital y 12 en Málaga. Se celebrará del 14 al 31 de octubre en Madrid, y en Málaga del 2 al 5 de noviembre.

Ruiz Mantilla ha explicado a los medios que ha buscado abrir el festival a “otros públicos”, para lo que ha introducido un bloque de programación, elegido por Ángel Luis Sucasa, dedicado al género fantástico, el terror y los videojuegos.

Entre los nombres que conforman la programación, se encuentran Philippe Sands, escritor francobritánico y autor de novelas como Calleb Este-Oeste (Anagrama, 2017) o ensayos sobre la ilegalidad de la guerra de Irak; Mariana Enríquez, la inquietante autora argentina y ganadora del Premio Herralde por Nuestra parte de noche; Leonardo Padura, escritor y periodista cubano galardonado con el Premio Princesa de Asturias de las letras y Rodrigo Rey Rosa, una de las voces narrativas más importantes de la novela centroamericana actual.

Los representantes de la literatura española traen narradores como Elvira Lindo, periodista y escritora española creadora de Manolito Gafotas; Antonio Muñoz Molina, escritor y académico de la Real Academia Española; Carme Riera, escritora mallorquina que escribe  en castellano y catalán que fue Premio Nacional de las letras españolas; Manuel Jabois, periodista y escritor español, que presenta su nueva novela Mirafiori (Alfaguara, 2023); Bob Pop, escritor, crítico y guionista de televisión, colaborador de medios y adjunto a la dirección de La Marea. Las voces más jóvenes estarán representadas por el laureado poeta Mario Obrero, uno de los rostros más representativos de la poesía joven española y Elizabeth Duval, escritora, filósofa, portavoz de Feminismo, Igualdad y Derechos LGBTI de Sumar y colaboradora de elDiario.es.

En esta extensa programación que reúne 140 participantes (unos diez menos que en 2022), la organización admite que no ha llevado un especial recuento atendiendo a la paridad de género, esperando que ocurriera “de manera espontánea”. Pero la cuenta final se escora hacia los participantes masculinos: con 83 hombres y 57 mujeres. 

La intención del festival es tender “un puente, donde la cultura en español tiene una voz poderosa: Latinoamérica, Iberoamérica, Europa y España”, dijo Ruiz Mantilla a los medios. Por ello, dentro del marco del festival, se entregará el Premio Festival Eñe al escritor nicaragüense y Premio Cervantes 2017, Sergio Ramírez, quien se encuentra exiliado en España debido a la situación política que atraviesa su país. El galardón recae sobre él porque “ha demostrado cómo de una manera ejemplar no se mueve de sus principios”, es un “demócrata convencido que desde el centroizquierda se enfrenta a autoritarios fascistas que van de revolucionarios”, según valoró el director artístico del festival. El festival otorgará otro reconocimiento al talento joven, que ha recaído en esta edición en la escritora y periodista canaria, Andrea Abreu, autora de Panza de burro.

La programación, tradicionalmente centrada en el idioma castellano, abre también lo que denomina “ventanas a las lenguas cooficiales”, que fueron introducidas el año anterior. Se repite el espacio dedicado a la literatura en catalán, comandada por Inma Monsó, acompañada de autores como Llucia Ramis, Andrea Genovart o Jordi Cornudella. También repite la literatura en euskera, con conversatorios como Mundos queer en euskera, comisariada por Kirmen Uribe, en la que intervienen Ángel Erro, Aitzole y Danele Sarriugarte. Sin embargo, un año más se queda fuera un espacio dedicado a la literatura en gallego.

Preguntada la organización al respecto por elDiario.es, ha explicado que “no ha habido acuerdo con las instituciones”, ya que colabora con las diferentes administraciones autonómicas para configurar las programaciones en las otras lenguas oficiales. Es decir, no han conseguido un acuerdo con la Xunta de Galicia, a pesar del “esfuerzo”. Es notoria esta ausencia en unos tiempos en los que la cultura en lengua gallega alcanza hitos como el Premio Nacional de Poesía a la poeta gallega Yolanda Castaño, el drama rodado en gallego O corno galardonado con la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián o el poeta gallego Ismael Ramos, también colaborador de elDiario.es, alzándose el pasado año con el Premio Nacional de Poesía Joven Miguel Hernández que concede el Ministerio de Cultura. 

Es el primer Eñe tras el fallecimiento de Arnaut y se ha querido mantener muy presente su legado. El propio director ha recalcado: “Nos preguntamos a diario qué diría de esta programación en el sentido estético”. Poniendo el ejemplo, según explicó a los periodistas, de qué cara habría puesto cuando le dijeran que incluirían el mundo de los videojuegos en el festival: “Se lo tendríamos que haber dicho con cuidado”, advirtió.