El grupo Air France-KLM disminuirá su actividad entre un 70 % y un 90 % en los próximos dos meses a causa de las restricciones para los desplazamientos y la reducción de la demanda generada por la epidemia del coronavirus.

En un comunicado, la compañía aérea franco-holandesa señaló que como consecuencia de esa disminución Air France dejará en tierra toda su flota de aviones Airbus A380, de gran capacidad, y KLM hará lo mismo con todos sus Boeing 747.

El grupo vigilará la evolución de la situación a diario y realizará nuevos ajustes si son necesarios, asegura en la nota.

En la apertura de la Bolsa de París, los títulos de Air France-KLM caen en torno a un 17 %.

Para luchar contra los efectos del coronavirus, el grupo ha lanzado medidas de ahorro adicionales que generarán 200 millones de euros y examinará con los representantes de los trabajadores la implantación de la actividad parcial.

Pese a todo, reconoce que sus previsiones para las finanzas del grupo "se han deteriorado profundamente" respecto a las presentadas en la publicación de los resultados anuales.

"La caída en los ingresos del negocio de pasajeros solo será compensada en un 50 % por la bajada en costes variables antes de las medidas de ahorro", señala el grupo franco-holandés.

El pasado 20 de febrero, en la publicación de resultados anuales, el grupo estimó que la epidemia del coronavirus en China le costaría entre 150 y 200 millones de euros de resultado de explotación, a condición de que pudiese reanudar progresivamente sus operaciones con ese país a partir de abril.

Los cálculos de este lunes se conocen después de que el pasado sábado el director general de KLM, Pieter Elbers, anunciase que planea recortar entre 1.500 y 2.000 empleos y reducir la jornada laboral de pilotos y miembros de tripulación hasta en un 40 % para hacer frente a las consecuencias de la cancelación de vuelos por el coronavirus.