El fondo CVC ofrece más de 20.000 millones de dólares por Toshiba

El conglomerado industrial japonés Toshiba ha recibido una propuesta del fondo CVC Capital Partners para adquirir la compañía en una transacción valorada en más de 20.000 millones de dólares (16.843 millones de euros), según ha adelantado el diario 'Nikkei' y ha confirmado la compañía.

En un comunicado, la empresa ha informado de que recibió una propuesta este martes, así como que "pedirá más aclaraciones y la considerará detenidamente".

Según el periódico, CVC considera ofrecer una prima del 30% sobre el precio de las acciones del grupo nipón, lo que situaría el valor del acuerdo en alrededor de 2,3 billones de yenes (17.522 millones de dólares).

Asimismo, el fondo de inversión valorará la posibilidad de dar entrada a otros inversores para que participen en la adquisición.

Las acciones de Toshiba han reaccionado con fuertes subidas a la noticia del interés de CVC y han cerrado la sesión con un avance del 18,28% en la Bolsa de Tokio.

La propuesta tendría como objetivo acelerar la toma de decisiones en un conglomerado que ha enfrentado con frecuencia quejas de sus inversores activistas mientras intenta recuperarse de una serie de escándalos y las grandes pérdidas registradas en los últimos años.

Entre los episodios más recientes, en marzo los accionistas de Toshiba votaron a favor de la propuesta del fondo singapurense Effissimo Capital, su mayor accionista, de abrir una investigación independiente sobre la legitimidad de la cúpula de la empresa tras denunciar irregularidades en la votación para reelegir a Kurumatani.

La oferta limitaría este tipo de conflictos, al dejar la empresa en manos de un solo accionista. Kurumatani, el primer presidente de fuera del grupo designado en 53 años, fue vicepresidente del grupo financiero Sumitomo Mitsui antes de pasar a presidir la sucursal japonesa de CVC.

Para que la operación salga adelante, primero es necesario obtener la autorización del regulador japonés. El Ministerio de Finanzas tendría que revisar con antelación la oferta, en virtud de la normativa implementada en 2020 que impone un mayor escrutinio de la inversión extranjera en empresas con negocios en determinadas áreas.

Toshiba ha protagonizado una sucesión de escándalos de contabilidad en los últimos años, que le valieron amonestaciones de los reguladores nipones, y sus problemas económicos le han llevado a deshacerse de su rama nuclear en Estados Unidos y de su filial de semiconductores, la más rentable del antaño gigante tecnológico japonés.