El Gobierno remitirá a Bruselas una actualización del Programa de Estabilidad hasta 2026 en el que adelanta un año el objetivo de déficit de las cuentas públicas del 3%. Tras el descuadre de las cuentas de 2020 por la pandemia, el Gobierno fijó para 2025 la vuelta a unos niveles inferiores al 3%, que marcaba las reglas fiscales de la UE. Ahora, el Ejecutivo adelanta este objetivo a 2024, cuando llegará al 3% de déficit, según la senda que trasladará a Bruselas.

De este modo, la evolución esperada del déficit por parte del Gobierno es la siguiente. Para este año mantiene el objetivo del 3,9%, para el próximo año espera alcanzar al 3%. Para los dos siguientes ejercicios, Hacienda aspira a moverse por debajo de la barrera del 3%, con el 2,7% en 2025 y el 2,5% en 2026.

España obtuvo un déficit del 4,8% en 2022, dos décimas menos de lo inicialmente previsto. En 2020, con los peores efectos de la pandemia, el desfase alcanzó el 10,1%, a niveles de la pasada crisis financiera. Ahora, el ejecutivo aspira a que en cuatro años se haya podido volver a los límites de los esquemas de reglas fiscales de la UE, en línea con la situación previa a la crisis sanitaria. Entre 2020 y 2022 ha reducido el déficit en 49.500 millones, según cifran fuentes del Ministerio.

El Ejecutivo achaca la reducción del déficit al "sólido crecimiento económico de España". Además, remarcan que se logra con esta senda una consolidación fiscal "sin aplicar recortes".

Es la vía de los ingresos la que está dando mayores rendimientos en la reducción del déficit. Durante el pasado año, los ingresos públicos se incrementaron un 14,4%, alcanzando un récord histórico de recaudación. El Gobierno insiste en que sólo cinco puntos de ese crecimiento se debió a la inflación. Para los próximos años prevé un aumento más moderado pero siempre por encima de la inflación, achacando el crecimiento al empuje de la economía y el empleo.

La presentación de esta nueva senda de déficit por parte del Gobierno llega un día después de que Bruselas aprobara un nuevo esquema de reglas fiscales. Se trata un sistema 'a la carta' para que los estados miembros lleguen a los objetivos máximos del 3% del déficit y del 60% de deuda pública en el que la Comisión Europea negociará individualmente con los planes de ajuste. Entre otras cuestiones, la decisión de las autoridades comunitarias establecen una reducción de 0,5% del déficit anual para aquellos países que se encuentren por encima. Este nuevo esquema ha sido aplaudido por países como España, pero ha generado inquietud en otros como Alemania.

El Programa de Estabilidad es un documento que los países de la UE deben enviar anualmente a la Comisión Europea para trasladar las perspectivas presupuestarias a medio plazo para expresar el cumplimiento de los objetivos discales de la UE. Junto con este programa, el Gobierno envía el programa de reformas. Ambos documentos todavía no han sido publicados y en ellos se podrán conocer más detalles sobre la evolución esperada por el Gobierno.

"Estamos aprovechando el fuerte crecimiento económico y la creación de empleo para reducir lo más rápidamente posible las ratio de déficit y de deuda sobre el PIB", ha asegurado la vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. "Se trata de una noticia importante que confirma el compromiso de nuestro gobierno con la responsabilidad fiscal, con la absorción del golpe que supuso la pandemia y con el crecimiento sostenible en los próximos años", ha añadido en un acto público.