El presidente del Consejo de Supervisión del Banco Central Europeo (BCE), Andrea Enria, aseguró este martes que los bancos de la eurozona han evitado pagar más de 27.000 millones de euros en dividendos, después de que la autoridad monetaria recomendara no repartirlos hasta al menos el 1 de octubre.

"Según la información que tenemos ahora mismo, había 35.000 millones en dividendos que se suponía que se iban a pagar y más de 27.000 millones han quedado por el momento retenidos al completo en los balances de los bancos y eso es un resultado importante", declaró el economista italiano durante una comparecencia virtual en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Eurocámara.

El pasado 27 de marzo, el BCE recomendó a la banca privada de la eurozona "no pagar dividendos de los años fiscales 2019 y 2020 hasta al menos el 1 de octubre de 2020" y no recomprar acciones propias (buyback) para premiar a los accionistas, ante la pandemia del coronavirus.

Enria destacó hoy que las entidades bajo la supervisión directa del Banco Central Europeo han seguido "correctamente" esa recomendación y añadió que las autoridades nacionales han extendido el alcance de esa sugerencia a instituciones "menos significativas", con lo que se ha logrado "una muy amplia cobertura" del consejo realizado por el BCE.

"La mayoría de bancos ha cumplido con nuestra recomendación", reiteró.

De hecho, explicó que los únicos bancos que han pagado los dividendos son aquellos en los que la junta general de accionistas ya había aprobado distribuirlos antes de la recomendación del BCE y la legislación nacional del país donde tiene su sede la entidad no permite dar marcha atrás.

Añadió que, en otros casos, los dividendos ya se habían repartido antes de que el Banco Central Europeo se pronunciara.

"En todos los demás casos ha habido muy buena disciplina", constató Enria.

El BCE emitió una recomendación, pero no ha obligado a los bancos de la eurozona a suspender el pago de los dividendos. El economista italiano consideró, en cualquier caso, que una recomendación ya es "un instrumento importante".

Por otro lado, Enria evitó pronunciarse sobre la sentencia del Tribunal Constitucional alemán que declaró este martes parcialmente contrario a la Constitución del país el programa del compra de bonos de deuda del Banco Central Europeo (BCE) puesto en marcha en 2015.

"Esta es una sentencia importante que, por supuesto, no he tenido tiempo de mirar", comentó, y dijo que no puede hacer comentarios.

También destacó que el sistema bancario de la eurozona se encuentra en un estado de forma "muy resistente" y aseguró que desde el Consejo de Supervisión del BCE se han centrado en garantizar que las entidades pueden seguir apoyando la economía real "en el futuro", también durante la recuperación tras la pandemia.