La Comisión Europea ha propuesto un Certificado Verde Digital con el objetivo de agilizar la movilidad e impulsar el turismo en verano, principal fuente de ingresos de un buen puñado de países europeos, entre ellos España. Ni será verde ni sólo digital, pero tendrá código QR, y será bilingüe y gratuito. Ahora debe pasar el trámite legislativo comunitario –el visto bueno de los Gobiernos y del Parlamento Europeo– y la puesta en marcha de un mecanismo informático para que sea posible su emisión y lectura en todos los países de la UE antes de entrar en vigor.

Las autoridades nacionales son las encargadas de emitir el certificado. Podría, por ejemplo, ser emitido por hospitales, centros de pruebas, autoridades sanitarias. La versión digital se puede almacenar en un dispositivo móvil. Los ciudadanos también pueden solicitar una versión en papel. Ambos tendrán un código QR que contiene información esencial, así como un sello digital para asegurarse de que el certificado sea auténtico.

El Certificado Verde Digital será aceptado en todos los Estados miembros de la UE, si bien para ello debe superar las negociaciones en el Consejo (los Gobiernos) y la votación del Parlamento Europeo, "y ayudará a garantizar que las restricciones actualmente vigentes puedan levantarse de manera coordinada", señala Bruselas.

Al viajar, todo ciudadano de la UE o nacional de un tercer país que resida en la UE y que posea un Certificado Verde Digital debería estar exento de las restricciones a la libre circulación, de la misma forma que los ciudadanos del Estado miembro visitado.

Si un Estado miembro sigue exigiendo a los titulares de un certificado verde digital que se pongan en cuarentena o realicen pruebas, debe notificarlo a la Comisión Europea y a todos los demás Estados miembros y justificar esta decisión.

Sí. El Certificado Verde Digital debería facilitar la libre circulación dentro de la UE. No será una condición previa para la libre circulación, que es un derecho fundamental en la UE. El Certificado Verde Digital también puede probar los resultados de los tests PCR, que a menudo se requieren bajo las restricciones de salud pública aplicables.

El certificado es una oportunidad para que los Estados miembros ajusten las restricciones existentes por motivos de salud pública. "Esperamos que tengan en cuenta esta prueba del estado de COVID-19 de las personas para facilitar el viaje", afirma la Comisión Europea.

El Certificado Verde Digital contiene información clave necesaria, como nombre, fecha de nacimiento, fecha de emisión, información relevante sobre la vacuna / test / recuperación de la enfermedad y un identificador único.

Los certificados solo incluirán un conjunto limitado de información. Para fines de verificación, sólo se coteja la validez y autenticidad del certificado, revisando quién lo emitió y firmó. Todos los datos de salud permanecen en el Estado miembro que emitió un Certificado Verde Digital.

Se emitirán certificados de vacunación a una persona vacunada para cualquier vacuna de la COVID-19. Cuando se trata de renunciar a las restricciones de libre circulación, los Estados miembros deberán aceptar certificados de vacunación para las vacunas que recibieron la autorización de comercialización de la UE.

Los Estados miembros pueden decidir extender esto también a los viajeros de la UE que recibieron otra vacuna.