Al menos ocho personas han muerto y catorce han resultado heridas, de las que siete están en estado crítico, tras un tiroteo sucedido en la noche de este jueves en la localidad serbia de Mladenovac, a unos 60 kilómetros de Belgrado. La Policía ha detenido al atacante, de 21 años de edad, tras permanecer rodeado varias horas, en los alrededores de la ciudad de Kragujevac, a unos 140 kilómetros de la capital. Es el segundo ataque en el país esta semana después de que el miércoles un adolescente matase a nueve personas en una escuela de la capital.

"El ataque de esta noche fue un ataque terrorista, un acto en que nuestras unidades especiales tuvieron la tarea de arrestar y neutralizar al terrorista", ha dicho el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, en una rueda de prensa. "El criminal ha sido arrestado y ya no verá la luz del día, metafóricamente hablando. No saldrá de la cárcel", ha indicado el presidente, que no ha precisado a qué tipo de motivación terrorista se refería.

El tiroteo ha tenido lugar en la aldea de Dubona, cerca de Mladenovac. En tres pueblos de los alrededores, la policía había bloqueado la zona y registraba casa por casa en busca del atacante. Unos 600 policías de unidades especiales estaban en busca del agresor, según ha informado la televisión pública serbia RTS, y según medios locales el atacante habría disparado con armas automáticas. El ministro del Interior, Bratislav Gasic, ha calificado el crimen de "acto terrorista".

Entre los fallecidos hay un agente, que estaba fuera de servicio en ese momento, así como su hermana. Los heridos han sido atendidos en varios hospitales de Smederevo y Belgrado. Dos de ellos, de 21 y 23 años, han sido intervenidos quirúrgicamente y su vida corre peligro.

El tiroteo se ha producido casi dos días después de otro acaecido en Belgrado el miércoles en el que un joven mató a ocho estudiantes y a un guardia de seguridad en un colegio de enseñanza primaria. El jugador de baloncesto Luka Doncic ha anunciado que pagará los funerales, así como el coste de la ayuda psicológica de los supervivientes, a través de la Fundación Luka Doncic. "Tengo el corazón roto por el trágico tiroteo en una escuela en Serbia y la pérdida de vidas, incluidas las de niños inocentes", ha escrito en un mensaje en Twitter.

Vucic ha anunciado una serie de medidas urgentes para reducir el número de personas que pueden poseer armas. Según ha dicho, en Serbia, un país de 6,8 millones de habitantes, hay unas 760.000 armas en manos de unas 400.000 personas. El plan es reducir en un 90 % el número de personas que actualmente tienen permiso de armas, aumentar los controles y elevar las sanciones para quienes posean armas de forma ilegal.

"El ataque de esta noche impone al Ministerio del Interior enmendar de forma urgente la ley de armas y municiones", ha declarado el presidente serbio. "Todos los que tienen armas -no me refiero a las de caza- son unas 400.000 personas, y pasarán por una revisión y no quedarán más de 30.000 o 40.000. Para las armas ilegales, las penas serán muy altas". También ha anunciado nuevos refuerzos policiales, unos 1.200 nuevos efectivos en los próximos seis meses, para situar a un policía en cada escuela, además de los guardias de seguridad ya presentes.

Se desconocen los motivos del atacante, un hombre de 21 años que, según Vucic, repetía la palabra "menosprecio" mientras disparaba a sus víctimas en plena calle. Según informaciones extraoficiales, el atacante salió de un coche en el que viajaba solo y empezó a disparar. De acuerdo con medios serbios, se trata del hijo de un militar.

La Policía prosigue el trabajo para esclarecer los hechos y las circunstancias de lo ocurrido. Hasta ahora, los asesinatos masivos han sido raros en Serbia.