La deuda del Estado griego alcanzó en 2019 el 176,6 % del producto interior bruto (PIB) del país, con una reducción de 4,5 puntos porcentuales respecto al año anterior, según los datos publicados este miércoles por la oficina helena de estadísticas (Elstat).
La deuda del Estado había aumentado en 2018 un 4,9 % hasta alcanzar el 181,1 % del PIB.
El PIB alcanzó los 187.456 millones de euros a precios corrientes en 2019, con un incremento del 1,5 % respecto al año anterior.
Los presupuestos de 2019 presentaron un superávit de 2.745 millones de euros (1,5 % del PIB).
En cuanto al superávit primario -que excluye el pago de la deuda y es el que se toma en cuenta en las negociaciones con los acreedores del país-, alcanzó el 4,4 % del PIB, a pesar de las ayudas sociales que distribuyó el gobierno del izquierdista Alexis Tsipras, antes de las elecciones anticipadas del pasado julio, y los alivios fiscales que introdujo justo después de ellas el ganador, el conservador Kyriakos Mitotakis.
Sin embargo, las consecuencias financieras de la pandemia del coronavirus han cambiado radicalmente las perspectivas de la economía griega que, tras ocho años de recesión durante los cuales perdió el 25 % de su PIB, acumuló cuatro años consecutivos de crecimiento (2016-2019).
Para el año en curso se prevé una recesión de entre el 4 % y 10 % del PIB.
La deuda del Estado, según las estimaciones más recientes del Fondo Monetario Internacional (FMI), alcanzará el 200,8 % del PIB.