El Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescate europeo, no ve riesgo de que España no reembolse los 23.700 millones de euros que aún tiene que devolver del programa de asistencia financiera para la banca que recibió en 2012, según su informe anual de 2019 publicado este jueves.
El documento no tiene en cuenta el impacto de la pandemia de coronavirus, que afectó al país ya en 2020, aunque señala que ha "aumentado de forma importante la incertidumbre sobre las perspectivas económicas, como en otras áreas de Europa".
España recibió 41.333 millones de euros en 2012 para sanear y reestructurar su sector bancario, de los cuales aún debe devolver el 57 % tras haber realizado en los últimos años varios reembolsos anticipados.
"El MEDE sigue evaluando positivamente la habilidad de España de honrar el pago de los costes de servicio de su préstamo", dice el informe, que pasa además revista brevemente a la situación económica y de la banca en el país.
En este sentido, destaca que el crecimiento se moderó en 2019 (del 2,5 % en 2018 al 2 % el año pasado), si bien fue "más equilibrado" y superó el de otros socios de la eurozona.
Asimismo señala que el déficit aumentó en dos décimas, hasta el 2,7 % del PIB "en ausencia de un presupuesto del Gobierno central" y que la deuda pública se redujo en 2,1 puntos hasta el 95,5 %, lo que supone que la deuda descendió a su ritmo más rápido desde 2007 y alcanzó su cota más baja en cinco años, si bien sigue siendo "elevada".
En cuanto a su financiación, el MEDE destaca que España mantuvo un buen acceso a los mercados en 2019, que el interés de los bonos estatales a diez años cayó del 1,4 % al 0,4 % en el mercado secundario y que la prima de riesgo se redujo en 50 puntos, hasta los 70 puntos básicos.
La banca española mejoró su rentabilidad y la calidad de sus activos "ayudada por la recuperación económica y el mercado inmobiliario", en tanto que los niveles de créditos improductivos descendieron a niveles cercanos a la media de la eurozona.
Los colchones de capital son "adecuados", aunque el ratio de capital de máxima calidad CET1 sigue "sustancialmente" por debajo de la media europea, mientras que el ratio de apalancamiento es superior a esta, dice el informe.
El documento calcula que España se ahorró 1.400 millones de euros (0,1 % de su PIB) en 2019 en costes de servicio de la deuda al haber obtenido un préstamo del MEDE en lugar de haber conseguido la financiación por sí misma en el mercado.
En cuanto a otros países que recibieron rescates financieros, este ahorro presupuestario ascendería a 14.100 millones en el caso de Grecia, a 1.500 millones para Portugal, a 800 millones para Irlanda y 400 millones para Chipre en 2019.