Los países en desarrollo de Asia crecerán sólo un 0,1 % en 2020 como consecuencia del impacto de la pandemia de COVID-19, el ritmo más lento desde 1961, para progresar un 6,2 % en 2021, según las últimas previsiones del Banco Asiático de Desarrollo (BAD) publicadas este jueves.

La entidad de crédito, con sede en Manila, rebajó a la baja sus pronósticos del pasado abril, cuando predijo que los 45 países en vías de desarrollo de Asia-Pacífico crecerían un 2,2 % este año.

"Las economías de Asia y Pacífico continuarán sintiendo el impacto de la pandemia a pesar de iniciar la desescalada y del reinicio de la actividad económica.

Sí vemos una mayor perspectiva de crecimiento en la región para 2021", apuntaba el economista jefe del BAD, Yasuyuki Sawada, en el informe publicado hoy.

Sawada destacó la necesidad de que los gobiernos adopten medidas más ambiciosas para amortiguar el golpe de la pandemia en la economía y prevenir nuevas oleadas de infecciones.

Las perspectivas del BAD para China, la gran potencia regional, tampoco son muy optimistas, ya que prevé que la segunda mayor economía del mundo se desacelere hasta el 1,8 %, desde el pronóstico anterior del 2,3 %, en parte también como consecuencia del impacto negativo de la guerra comercial con EEUU.

Debido a la caída de la demanda y la bajada en los precios del petróleo, la inflación para Asia en desarrollo disminuirá al 2,9 % en 2020 y al 2,4 % en 2021.