En el marco del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, los parlamentarios uruguayos hicieron un llamado a mantener vivo el recuerdo del horror de la Shoá y a "prender la luz de alarma" contra cualquier atisbo de odio para que no se repita.

En una sesión especial, y ante una tribuna llena en la que estaban presentes representantes del Comité Central Israelita del Uruguay, el embajador de Israel en el país, Yoed Magen, así como diplomáticos y autoridades del Gobierno, la Comisión Permanente del Parlamento rindió homenaje a las víctimas del holocausto.

En esta ocasión, y con el 75 aniversario del cierre del campo de concentración de Auschwitz como fondo, los legisladores remarcaron la importancia de preservar la memoria de los hechos para que nunca más se repitan.

La senadora del Frente Amplio (FA), coalición de izquierdas que gobierna el país desde 2005, Sandra Lazo sostuvo que la Shoá (Holocausto, en hebreo) fue "la tragedia más espantosa padecida por el pueblo judío" y una de las peores de la historia.

"La condición humana mostró en los campos de concentración nazi su aspecto más terrible (...) y la magnitud de aquellos trágicos hechos debe ser un llamado permanente, tornarse en una oposición militante a que hechos similares se lleven adelante hacia cualquier otro colectivo humano", enfatizó la parlamentaria.

En la misma línea se expresó el diputado del Partido Nacional (PN, centroderecha) Pablo Abdala, quien resaltó que el paso del tiempo "no es excusa para la indiferencia" y que el recuerdo del Holocausto judío tiene que propiciar un estado "de vigilia" para que no vuelva a suceder algo similar.

"El mejor homenaje que podemos brindarle a los seis millones de judíos que murieron en los campos de concentración, a la valentía de los que murieron y de los sobrevivientes es preservar la memoria, pero no en términos de mantener el relato y reproducirlo sino también de mantener la memoria viva, la memoria ejemplar", dijo.

En tanto, la senadora del FA Daisy Tourné, que presidió la sesión, compartió la preocupación del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, por "un resurgimiento preocupante en los ataques antisemitas en todo el mundo" y apuntó que ante ese rebrote de odio hay que "prender la luz de alarma".

"Después de 75 años los neonazis y los supremacistas blancos están resurgiendo y creo que esta conmemoración debe servir para prender una luz de alarma; nos urge considerar (...) que mientras exista el odio debe existir la absoluta determinación de la lucha por una sociedad inclusiva, democrática y de paz", recalcó.

En otro tono, el senador por el Partido Colorado (PC, centroderecha) Pedro Bordaberry estimó que, para honrar realmente a las víctimas de la Shoá, Uruguay debe actuar y "trasladar la embajada uruguaya (en Israel) a Jerusalén".