La Justicia europea reconoce el derecho a la indemnización de los afectados por el

La Justicia europea reconoce el derecho a la indemnización de los clientes que se vieron afectados por el conocido como 'dieselgate', la trama desvelada hace unos años por la que grandes compañías, como Volkswagen, Audi o Mercedes Benz, habían manipulado los sistemas de medición de emisión de gases contaminantes en los vehículos. Aunque los juzgados de los países habían ido tomando decisiones individuales, el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) establece ahora una jurisprudencia homogeneizada para los 27 al resolver una cuestión prejudicial de un tribunal alemán ante una denuncia de un consumidor contra la compañía Mercedes-Benz.

"El comprador de un vehículo de motor equipado con un dispositivo de desactivación ilícito goza del derecho a ser indemnizado por el fabricante de automóviles cuando dicho dispositivo haya causado un daño a ese comprador", señala el TJUE, que señala que la legislación comunitaria, más allá de regular la homologación de motores y los límites de emisiones de óxidos de nitrógeno, también protege "los intereses particulares del comprador individual de un vehículo de motor frente al fabricante de este cuando dicho vehículo esté equipado con un dispositivo de desactivación prohibido".

Así, el TJUE establece que los estados miembro deben dotar a los compradores de esos vehículos del derecho a ser indemnizados por los fabricantes, aunque no entra en la cuantía de los pagos salvo que establece que debe ser adecuado "a los daños causados". También establece una limitación al señalar que no se puede producir "un enriquecimiento injusto de los beneficiarios".

En España, por ejemplo, el juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid condenó a Volkswagen a pagar 3.000 euros a los afectados por el 'dieselgate'. Un juzgado de Manacor obligó a Volkswagen a abonar los 19.378 euros de un Skoda comprado en 2012 ya que el contrato no incluía información sobre las emisiones nitrógeno.

Aunque el caso que ha analizado el tribunal de Luxemburgo es por una denuncia en Alemania, el Supremo de ese país dictaminó que el comprador de un vehículo equipado con un dispositivo de desconexión ilegal “puede exigir el reembolso del precio de compra abonado” en una sentencia en la que también condenaba a Volkswagen. En ese país, las denuncias ascendían a unas 60.000.

El 'dieselgate' afectó a al menos once millones de vehículos cuyos motores habían sido trucados para simular menos emisiones contaminantes de las reales. El grupo Volkswagen fue el principal culpable y el escándalo se llevó por delante al que entonces era el CEO, Martin Winterkorn, y la investigación afectó a una veintena de directivos, entre ellos al presidente de Audi, Rupert Stadler, que fue detenido, junto a una veintena de directivos acusados de fraude y publicidad falsa. En Estados Unidos, Volkswagen llegó a un acuerdo con las autoridades judiciales y 475.000 propietarios por un importe de 14.700 millones de dólares, según informó Reuters.

Más allá de la estafa a millones de conductores, la multiplicación por entre cuatro y siete de los gases contaminantes supuso un incremento de las muertes prematuras (unas 5.000 al año en el viejo continente), además de un empobrecimiento de las aguas. También supuso una merma en los ingresos públicos ya que los impuestos calculados en virtud de las emisiones de los motores fueron menores.