Back to Top

Hacienda descartó en el último momento una deducción específica para mantener al salario mínimo exento del IRPF

Hacienda descartó en el último momento una deducción específica para mantener al salario mínimo exento del IRPF

María Jesús Montero tuvo sobre la mesa una propuesta de los técnicos de su Ministerio para evitar que los peceptores del SMI paguen el impuesto de la Renta por primera vez este 2025. La medida tiene un coste de 300 millones para las arcas públicas, y no implica volver a elevar el umbral exento, por lo que dejaba fuera a pensionistas y al resto de contribuyentes con sueldos superiores

Por qué subir el umbral exento del IRPF afecta a todas las rentas y otras claves del impuesto sobre el salario mínimo

Hacienda descartó en el último momento una deducción específica para mantener al salario mínimo (SMI) exento del IRPF, según fuentes conocedoras a las que ha tenido acceso de elDiario.es. La vicepresidenta primera María Jesús Montero tuvo sobre la mesa hasta el lunes por la tarde una propuesta de sus técnicos para evitar que todos los perceptores del SMI paguen el impuesto de la Renta por primera vez este 2025. La medida tiene un coste de 300 millones para las arcas públicas, y no implica volver a elevar el umbral exento, por lo que dejaba fuera a los pensionistas y contribuyentes con sueldos superiores. Este periódico se ha puesto en contacto con el Ministerio de Hacienda para recabar más información, pero no ha obtenido más aclaraciones.

El martes por la mañana, el Consejo de Ministros aprobó el nuevo aumento del salario mínimo de 50 euros al mes, hasta los 1.184 euros (en 14 pagas, en total 16.576 euros brutos al año). Por primera vez, el Ministerio de Hacienda decidió no adaptar el umbral de ingresos exento de pagar IRPF, como sí había hecho durante los últimos ejercicios para evitar que el impuesto restara una parte de la subida del SMI. Por tanto, este año, algunos perceptores de “este sueldo digno de ingresos” tributarán por sus rentas del trabajo, y perderán una parte del incremento.

El Ministerio de Hacienda defiende que la mayor parte de trabajadores que ganan el salario mínimo seguirá sin sufrir retenciones por el IRPF porque los mínimos exentos son mayores por cuidar a otras personas, hijos o dependientes. Según sus cálculos, son medio millón los perceptores del SMI (el 20% de los 2,5 millones de personas que son en total) que pagará el impuesto de la Renta este 2025. Muchos de ellos, jóvenes, en sus primeros empleos. En la hostelería y la agricultura, principalmente.

En el primer gráfico de esta información se ve el caso de una persona soltera y sin hijos, que solo tiene ingresos del trabajo —el IRPF también grava las rentas del capital (dividendos...) y de las actividades económicas, aunque el 80% de lo que recauda el tributo es de los salarios—. Este 2025, el umbral de ingresos exento de pagar el impuesto de la Renta se queda en 15.876 euros. Es el mismo que en 2024, cuando este umbral se adaptó al salario mínimo bruto de ese ejercicio. Ahora, el SMI pagará IRPF, al igual que lo seguirán haciendo todos los ingresos del trabajo superiores a 15.876 euros (también los pensionistas).

Exactamente, este 2025, a la persona perceptora del SMI se le retendrán 300 euros al año (repartidos en las 14 nóminas, 21,4 euros por paga), y si hace la declaración de la Renta, a lo que no está obligada, se le exigirán otros 40 euros más, hasta 340 euros en todo el ejercicio. Como se observa en el segundo gráfico de esta información, el tipo de algo menos del 2%.

También pagarán por primera vez los perceptores del SMI que están al cuidado de un hijo pero al 50% con otra persona. En este caso, la retención en su nómina es de 111 euros al año, y la cuota de 112 euros. El tipo para este caso es de apenas un 0,7%.

Una deducción específica para el SMI

El Ministerio de Hacienda valoró y diseñó una deducción (con fórmulas y estimaciones incluidas) por esas cantidades, para beneficiar específicamente a estos trabajadores que ganan el salario mínimo. El coste de esta medida es de alrededor de 300 millones de euros, pero María Jesús Montero finalmente la descartó.

Esta deducción específica para el SMI es una medida distinta a volver a adaptar el umbral exento. Subir el umbral exento del IRPF aplicaría para todos los ingresos por debajo de 16.576 euros brutos al año, incluidas las pensiones, y eleva el coste para las arcas públicas (para todos los contribuyentes) a alrededor de 1.500 millones de euros, según trasladó representante del Ministerio de Hacienda en el grupo de expertos del SMI. Una cifra que es una décima del PIB (Producto interior Bruto).

En el coste de 1.500 millones de elevar el umbral exento de IRPF se añade también la infrarretención que se produce en ingresos cercanos al SMI. Como se observa en los gráficos de esta información, esta infrarretención por las correcciones y ajustes para suavizar “los errores de salto [como se conoce a los saltos en los tipos cuando los ingresos pasan de un tramo de tributacion al siguiente]” alcanza y supera el nivel en el que empieza a ser obligatorio hacer la declaración de la Renta, los 22.000 euros brutos al año. Esta infrarretención es responsable de buena parte de la pérdida de recaudación, y precisamente se subsana en cierta medida tras la campaña de la Renta.

Este lunes, Hacienda optó por no elevar el mínimo exento y tampoco introducir una deducción específica. Una decisión que ha abierto una nueva herida en el Gobierno de coalición, con el Ministerio de Trabajo de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pidiendo que el salario mínimo siga exento de pagar IRPF, junto al resto de socios del Ejecutivo a la izquierda. Mientras, el Partido Popular (PP) ha aprovechado para azuzar el discurso antimpuestos.

Moncloa entra en el debate del SMI y el IRPF

Moncloa ha entrado en el debate con un argumentario en el que destaca que “los expertos estimaron la idoneidad de la subida [del salario mínimo] teniendo ya en cuenta la tributación”. Además, recuerda que “se estima que menos del 20% de las personas que actualmente perciben el SMI podrían tener que tributar IRPF como consecuencia de la última subida. Y sabemos que, incluso en esos casos, todos recibirán un salario neto mayor en 2025 del que recibieron en 2024. Por ejemplo, un empleado soltero y sin hijos ganará 400 euros netos más que el año pasado”.

Otra razón que se arguye “por la que consideramos oportuno que algunos perceptores del SMI paguen IRPF” es “porque es necesario para que el SMI pueda seguir subiendo. Quienes dicen que el SMI no debería tributar lo que defienden en el fondo es que este siga siendo bajo. Lo conciben como una suerte de retribución marginal que no debe formar parte de la normalidad salarial y fiscal de nuestro mercado laboral. Esta visión es un error. El Gobierno ha subido un 61% el SMI entre 2018 y 2025, y planea seguir haciéndolo. Lo normal es que, en ese proceso, más receptores del SMI vayan superando el mínimo exento del IRPF. Que ocurra será buena señal: significará que cada vez más trabajadores tienen un mejor salario”.

Por otra parte, la Moncloa añade que “la desigualdad no se combate con exenciones fiscales, sino con servicios públicos fuertes”, y que hay “que impulsar una cultura fiscal responsable”. Por último, incide en que la decisión de Hacienda “ayudará a desplegar políticas públicas más eficaces”, porque “existe un consenso transversal entre los expertos sobre la conveniencia de expandir progresivamente el porcentaje de población cubierta por la declaración de la renta porque eso permitirá diseñar mejor las ayudas para ellos”.

El salario mínimo ha subido mucho y muy rápido

El salario mínimo rebasó el umbral de ingresos exento del impuesto de la Renta por primera vez en 2022. Fue la primera vez que Hacienda lo adaptó. Algo que ocurrió porque antes el SMI era muy bajo y desde entonces el Gobierno lo ha subido mucho y muy rápido. Un 61% hasta este 2025, como enfatizan en Moncloa, acercándolo mucho al salario más frecuente. 

De esta manera, otra clave de la decisión de Hacienda es que, en 2018, el salario mínimo era “marginal”. Apenas cubría a “unos pocos cientos de miles” de trabajadores y trabajadoras que no estaban bajo el manto de algún convenio colectivo.

Tras las sucesivas subidas del Gobierno de coalición progresista, el salario mínimo ha ido englobando cada vez a más y más gente. En un país de bajos salarios, el objetivo de tener un SMI que sea el 60% del salario medio neto ha ido superando las remuneraciones más reducidas de muchos convenios colectivos, hasta alcanzar a alrededor de 2,5 millones de personas trabajadoras, según los cálculos del Ministerio de Trabajo. Se trata casi del 13% del total de asalariados.

Distintos expertos consultados por elDiario.es lamentan que “si el SMI sigue acercándose al salario más frecuente, mucha gente deja de pagar IRPF. Esto es un problema económico, que muestra que los salarios en nuestro país son muy bajos, y eso es lo que hace que el salario medio esté muy encima del salario más frecuente”. La última derivada de este “problema” es que los salarios en general no han aumentado tanto como el SMI por la pérdida de fuerza de los sindicatos y exigua movilización de los trabajadores.

“Pedagogía fiscal”

Las vicepresidentas y ministras de Hacienda y Trabajo, María Jesús Montero y Yolanda Díaz, coinciden en que hace falta “pedagogía fiscal”, pero la segunda insiste en que hay que mirar a los más ricos. Prácticamente, existe consenso entre los expertos en que España necesita una profunda reforma fiscal para que se tapen los agujeros en el impuesto de Sociedades —los beneficios de las grandes empresas han crecido mucho más de lo que lo ha hecho su contribución fiscal—, o para que se iguale la tributación del capital (dividendos, alquileres...) a la del trabajo.

Pero el Gobierno apenas puede abordarla por su debilidad parlamentaria. En las últimas semanas, ha sido incapaz de sacar adelante el gravamen a las ganancias oligopolísticas del sector energético, con el que pretendía aumentar la recaudación en 1.000 millones. Mientras, ha anunciado rebajas fiscales a los propietarios que ingresan rentas por alquilar sus viviendas, a la que hizo referencia la propia Yolanda Díaz en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Cron Job Starts