El plan industrial de la Comisión Europea contempla incentivos fiscales y facilitar las ayudas de estado para las inversiones verdes. En paralelo, el gobierno comunitario presenta una propuesta para reducir las exigencias medioambientales a las empresas que ha desatado las críticas
Las ONG se revuelven contra el plan de la UE para competir contra EEUU y China por “debilitar” las normas de sostenibilidad
En plena encrucijada comercial y con una competencia cada vez más feroz de EEUU y China, la Comisión Europea ha presentado este miércoles el Pacto Industrial Limpio con el que pretende dar un espaldarazo a la industria ‘verde’, con inversiones, incentivos fiscales y ayudas públicas masivas.
Uno de los principales objetivos del plan es reducir los precios de la energía que lastran la competitividad de las fábricas europeas al haberse duplicado respecto a antes de la pandemia y superar en cuatro o cinco veces los de EEUU. Para ello la Comisión plantea a los estados miembros, que son los que tienen la competencia en materia fiscal, que reduzcan los impuestos de la factura de la luz.
Como parte del Plan de Acción para la Energía Asequible, se lanzará un proyecto piloto junto al Banco Europeo de Inversiones (BEI) para avalar por un importe de 500 millones de euros contratos a largo plazo de suministro de energía renovable a precio fijo, conocidos como PPAs. Esa era una vieja demanda del Gobierno español. Igualmente, recoge la posibilidad de implementar la denominada 'excepción ibérica' para desacoplar el precio del gas del de la electricidad a nivel europeo.
Financiar la industria verde es el gran reto que tiene la UE por delante. Fuentes comunitarias reconocen que la inversión hasta ahora “no es suficiente” para hacer frente a la descarbonización y la electrificación necesarias. La vicepresidenta primera, Teresa Ribera, enviará en los próximos días a los estados miembros su propuesta para flexibilizar las ayudas de estado.
“La industria de la UE necesita acceso inmediato al capital”, reconoce el documento presentado por Ribera y el vicepresidente para la Estrategia Industrial, Stéphane Séjourné. Por eso otra de las herramientas que ha diseñado la Comisión Europea es una herramienta para financiar el ‘made in Europe’ que cifra en 100.000 millones de euros. Además, la intención es reforzar el existente Fondo de Innovación y proponer un Banco de Descarbonización Industrial, con el objetivo de alcanzar una financiación de otros 100.000 millones de euros.
En paralelo a la aprobación del Plan Industrial Limpio, que ahora tendrá que someterse al desarrollo normativo de cada una de las propuestas, la Comisión Europea ha presentado un paquete 'ómnibus' para 'simplificar' en torno a un 35% los procedimientos administrativos de las empresas. En la práctica, supondrá una rebaja de las exigencias medioambientales.
SEGUIMOS AMPLIANDO ESTA INFORMACIÓN