Los ingresos de las familias por alquilar inmuebles se han duplicado desde 2008 hasta rebasar los 31.500 millones en 2024 y ya son la principal renta del capital en España, por delante de las financieras y las ganancias patrimoniales
Los datos que señalan que vamos a una economía de herederos como la de principios del siglo XX
Los ingresos de las familias por alquilar inmuebles (viviendas, locales o garajes) en nuestro país se han disparado en los últimos años por las subidas de precios y los arrendamientos turísticos hasta alcanzar máximos históricos en 2024.
Estas ganancias por los arrendamientos, que perciben algo más de tres millones de hogares (sin contar los que se obtienen a través de empresas), se han duplicado desde 2008 hasta rebasar los 31.500 millones en 2024.
Ya son la principal renta del capital en España, por delante de las financieras y las ganancias patrimoniales, según el último informe de recaudación de la Agencia Tributaria, publicado este jueves.
Estas tres fuentes de ingresos —los alquileres, el capital mobiliario (dividendos, intereses de los depósitos...) y las ganancias patrimoniales (plusvalías tras vender viviendas o acciones)— superan ya el 10% de todas las rentas de los hogares —las principales son las del trabajo (sueldos y pensiones)—. Un hito que no ocurría desde el estallido de la burbuja inmobiliaria, como se observa en el segundo gráfico de esta información.
El crecimiento de las rentas de los arrendadores fue del 6,5% en 2024. “Hay que tener en cuenta que el año anterior (2023) crecieron más, un 7,6%”, apunta Raquel Jurado, experta del servicio de estudios del REAF del Consejo General de Economistas (CGE). El aumento acumulado desde 2008 es exactamente del 95%, mientras que el acceso a la vivienda para los inquilinos se ha hecho más y más difícil y asfixiante, sobre todo en los últimos años.
El secretario general de Gestha (Sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda), José María Mollinedo, advierte de que el fuerte crecimiento de los ingresos por alquileres está recogido el afloramiento de las viviendas arrendadas para usos turísticos, en los que la Agencia Tributaria ha puesto el foco en los últimos años y que en su mayoría permanecían ocultos en las declaraciones del IRPF.
Este trabajo de la Agencia Tributaria puerta a puerta ha elevado la recaudación y ha mejorado la calidad de los datos tributarios registrados del mercado del alquiler después de haber levantado más de un millón de declaraciones “que incluyen rendimientos inmobiliarios”.
“Un mal endémico de nuestra economía”“Las elevadas rentabilidades que se consigue con las inversiones inmobiliarias son un mal endémico de nuestra economía”, lamenta Íñigo Macías, investigador de Oxfam Intermón, una de las organizaciones que lideran la lucha por una fiscalidad más justa y contra la desigualdad.
2024 también fue un gran año para quienes tienen ingresos financieros. Las rentas del capital mobiliario (dividendos, intereses...) saltaron de golpe casi un 50% desde 2023, de cerca de 20.000 millones hasta establecer otro récord histórico en España por encima de los 30.000 millones. Por una parte, “se debe a la subida de los tipos de interés” del Banco Central Europeo (BCE) que las entidades financieras trasladaron en parte a los depósitos de sus clientes, según destaca Raquel Jurado. Por otro lado, responde a un muy buen año para las empresas, que obtuvieron beneficios récord y repartieron importantes dividendos entre sus accionistas, como se explica en esta información.
Además, pegaron otro buen repunte, de algo más de 5.000 millones en solo doce meses (un 22%), las rentas de las familias por ganancias patrimoniales. Es decir, por las subidas de precios de los inmuebles y también de los activos financieros (principalmente acciones y fondos de inversión).
Por supuesto, estas tres formas de ganar dinero de los hogares se concentran en las capas más altas, las más ricas. Con la ventaja añadida de que estas rentas del capital pagan menos IRPF que las rentas del trabajo. Un ejemplo hipotético: si un millonario español ingresa por su sueldo como directivo tres millones de euros en un año, pagaría muchos más impuestos que si la misma persona hubiera obtenido todos sus ingresos del capital.
La mayoría de ingresos de los millonarios vienen del capital, que pagan menos en el IRPFPorcentaje de ingresos declarados en el IRPF por deciles de renta provenientes del trabajo (salarios, pensiones, desempleo, etc.), las rentas del capital (dividendos, ganancias patrimoniales, etc.), que pagan menos impuestos en el IRPF, y el resto (actividades económicas y rentas imputadas)
En el siguiente gráfico de esta información se entiende esta 'dualidad' del IRPF para las personas con más ingresos de nuestro país.
La dualidad de la declaración de la renta para los más ricosComparación de la cuota íntegra sobre la base general y sobre la base del ahorro en cada año para los declarantes con ingresos por encima de los 600.000€
Fuente: INE, Agencia Tributaria
Como se puede ver en el próximo gráfico, y de nuevo según los datos de la Agencia de Tributaria del informe de recaudación de 2024, los salarios se han incrementado un 39% desde 2008, mucho menos que las rentas del capital.
Por último, tanto el envejecimiento de la población como las últimas reformas de las pensiones favorecen el incremento de las rentas de las personas que salen del mercado laboral. Precisamente, según identifica José María Mollinedo, los pensionistas son uno de los perfiles más comunes de arrendadores de viviendas para uso habitual.
El secretario general de Gestha señala el otro perfil más común de arrendadores de viviendas para uso habitual, que son algo más de dos millones en total. “Son las personas que se cambian de casa, y en vez de vender la que dejan, la alquilan y con esa renta pagan la hipoteca de la casa nueva”, explica.
Hoy, para los que no son arrendadores, el acceso a la vivienda se ha convertido en el gran problema económico de España, sobre todo para los más jóvenes y en las grandes capitales y en los principales destinos turísticos, donde se concentran la mayor parte de los puestos de trabajo y la oferta de pisos o casas turísticas.
El crecimiento de la actividad en nuestro país ha sido muy destacado en nuestro país desde 2021 respecto al resto de grandes economías, y lo seguirá siendo este 2025 (según las últimas previsiones del FMI), incluso en pleno pico de incertidumbre por la guerra comercial. Si el acceso a la vivienda es el principal problema interno, el mercado laboral es la gran fortaleza, en buena parte por una importante incorporación de inmigrantes. Aunque los expertos ya advierten de “una desaceleración del incremento la población activa [la que trabaja o quiere trabajar]”, ya que la escasez de vivienda y los elevados precios “actuarán como cuello de botella para la inmigración y la incorporación de nueva fuerza laboral en general”, según resumió esta misma semana Raymond Torres, director de coyuntura económica de Funcas.