Por primera vez, el Ejército israelí podría ser castigado por su actuación en la Cisjordania ocupada, donde han muerto casi 500 palestinos desde el comienzo de la guerra en la Franja de Gaza hace seis meses y medio –incluso antes de octubre, 2023 había sido uno de los años más mortíferos en ese territorio donde los palestinos conviven con más de medio millón de colonos–.
Este domingo, las tropas israelíes concluyeron una redada que duró más de dos días y se saldó con 14 muertos en el campo de refugiados de Nur Shams, en el noroeste de Cisjordania.
De momento, la Unión Europea (UE) y Estados Unidos han aprobado sanciones contra colonos israelíes radicales por sus ataques y acoso de los palestinos, pero aún no han apuntado directamente al Ejército israelí y a sus operaciones en Cisjordania, en un momento en el que son más evidentes los abusos que cometen los uniformados en Gaza –que han sido documentados y denunciados por fuentes independientes, y han quedado capturados en vídeos de los propios soldados–. Algunas ONG han denunciado las violaciones de los derechos de los presos palestinos y de los ciudadanos de a pie en Cisjordania, de los cuales también han emergido imágenes grabadas con los móviles de los perpetradores.
La UE aprobó formalmente el pasado viernes las sanciones contra colonos violentos de Cisjordania, que sólo afectan a cuatro individuos y a dos organizaciones radicales, Lehava y Hilltop Youth. Este lunes, el alto representante de la Política Exterior europea, Josep Borrell, declaró que los 27 van a volver a abordar las sanciones contra colonos israelíes porque “en Cisjordania también se están incrementando los ataques contra los palestinos”.
Sanciones directas a un batallón del EjércitoPero, desde Washington, la Administración del presidente Joe Biden estaría planteando sancionar también a las FDI y a la Policía israelí que opera en Cisjordania, según fuentes gubernamentales citadas por el periódico Haaretz. Otra fuente oficial israelí dijo al diario israelí que los estadounidenses han alertado a su aliado respecto a esa posibilidad en las últimas semanas y han apuntado directamente a dos ministros del Gobierno de Benjamín Netanyahu: el de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, él mismo un colono.
La Casa Blanca anunció el viernes pasado la designación del ultraderechista Ben Zion Gopstein, cercano a Ben Gvir, fundador y líder de la organización Lehava (sancionada por la UE) por su implicación en “la violencia desestabilizadora que afecta Cisjordania”. “Estamos muy preocupados por la escalada de la violencia en Cisjordania en los últimos días e instamos a Israel a tomar todas las medidas apropiadas para prevenir ataques por parte de extremistas violentos y hacer que los responsables rindan cuentas”, dijo el Departamento de Estado en un comunicado.
Fuentes oficiales de EEUU revelaron a Haaretz que la Administración de Biden también planea anunciar sanciones contra el batallón Netzah Yehuda, que sería la primera unidad de la FDI que es sometida a una medida de este tipo por Washington. El batallón está desplegado en Cisjordania desde hace varios años y se ha visto envuelto en varios casos en los que ciudadanos palestinos han sido asesinados, tal y como destaca Haaretz.
También el medio estadounidense Axios publicó información sobre las posibles sanciones contra Netzah Yehuda y aseguró que “oficiales israelíes están muy preocupados porque esta decisión sin precedentes puede llevar a más sanciones contra otras unidades de las FDI”. Según Axios, las sanciones prohibirían que tanto el batallón como sus miembros recibieran cualquier ayuda militar o entrenamiento de EEUU, basándose en la ley Leahy (el nombre del senador que la elaboró en 1997), que establece que la ayuda exterior no puede destinarse a unidades de seguridad privada, policía o militares extranjeras que estén acusadas de forma creíble de cometer violaciones de los derechos humanos.
El Ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, se reunió este lunes con el batallón en cuestión y aseguró que cumple con “los valores de las FDI” y actúa conforme al derecho internacional. “Los comandantes y tropas del batallón Netzah Yehuda operan en la primera línea; desde el estallido de la guerra han estado trabajando para expulsar a las fuerzas del [grupo chií libanés] Hizbulá de la frontera norte, frustrar el terrorismo en Judea y Samaria [tal y como denomina Israel los territorios ocupados de Cisjordania] y, más recientemente, están operando para desmantelar brigadas de Hamás en Gaza”, detalló Gallant en un comunicado.
Además, el titular de Defensa reflejó los miedos a los que se refería Axios, citando fuentes anónimas. “Cualquier intento de criticar a una unidad entera arroja una pesada sombra” sobre las demás, por lo que afectaría a “todo el sistema de defensa” de Israel. El batallón está formado en exclusiva por hombres ultraortodoxos, que suelen tener posturas radicales respecto a los palestinos, musulmanes y cristianos.
¿Y los abusos cometidos en Gaza?Si bien la Administración estadounidense aplicaría sanciones a Netzah Yehuda por actuaciones ocurridas sólo en Cisjordania y antes del 7 de octubre, un oficial israelí dijo a Haartez que desde el Gobierno de Biden creen que “Israel no ha hecho suficiente para investigar a los soldados que han infligido daño a los civiles palestinos durante la guerra en Gaza”. “Creen que el Ejército tiene miedo de castigar a los soldados y comandantes violentos” por la reacción del Gobierno ultraderechista de Netanyahu, agregó la fuente.
El periódico israelí afirma que EEUU está investigando al menos a otras dos unidades supuestamente de la Policía de Israel, que si fueran sancionadas ya no podrían recibir ni equipamiento ni entrenamiento estadounidense.
Después de las filtraciones por parte de distintos medios, Netanyahu condenó las intenciones de EEUU de imponer sanciones a una unidad de las FDI, calificándolas de “colmo del absurdo”. “Si alguien cree que puede imponer sanciones a una unidad de las FDI, lo combatiré con todas mis fuerzas”, prometió el primer ministro en un comunicado difundido por Twitter este domingo. “He estado trabajando en las últimas semanas contra las sanciones a ciudadanos israelíes, incluso en mis conversaciones con la Administración estadounidense”, explicó. “En un momento en que nuestros soldados luchan contra monstruos terroristas, la intención de imponer sanciones contra una unidad de las FDI es el colmo del absurdo y una baja moral”, sentenció.
El Ejército israelí no ha emitido ningún comunicado sobre las probables sanciones estadounidenses ni sobre la posibilidad de que otros batallones o soldados sean castigados por sus abusos en la Franja de Gaza. Desde el comienzo de la guerra, el mando de las FDI sólo ha castigado a dos comandantes por su implicación en el ataque contra un convoy de la ONG World Central Kitchen (WCK), que acabó con la vida de siete de sus trabajadores en Gaza a principios de abril. Las FDI anunciaron en ese momento que el comandante de la brigada de apoyo de fuego y el jefe máximo de la brigada serían cesados de su cargo. Además, aseguraron que el comandante de la brigada y el comandante de la 162 División iban a ser amonestados formalmente, y el comandante del Comando Sur –que opera en esa zona del país– también serían reprendido por “su responsabilidad general en el incidente”.
Ningún soldado o mando militar israelí ha dado explicaciones o ha recibido algún castigo por la muerte de miles de civiles en Gaza, incluidos más de 14.600 menores, según el recuento de las autoridades locales. Más de 34.000 personas han fallecido en los pasados seis meses y medio en la Franja, y el Ministerio de Sanidad gazatí calcula que más del 70% eran mujeres y niños, por tanto, no eran combatientes. Muchos han perecido en ataques considerados indiscriminados sobre sus viviendas, escuelas, hospitales, templos religiosos e, incluso, panaderías, o por disparos de las tropas israelíes contra grupos de desplazados o aglomeraciones para recoger ayuda humanitaria.