El Gobierno de Costa Rica afirmó sentirse orgulloso pese a no haber ganado este jueves un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, una situación que no ve como una derrota pues le permitió "señalar lo que es correcto".
"Cuando se pelea por una causa justa y por principios no es posible salir derrotado, y la pelea sigue. La causa de Costa Rica es la defensa de los derechos humanos", declaró el presidente costarricense, Carlos Alvarado.
Costa Rica lanzó su candidatura hace apenas doce días con el fin de evitar que Venezuela, país señalado de violar los derechos humanos en el Gobierno de Nicolás Maduro, obtuviera un escaño en el Consejo.
Por Latinoamérica estaban disponibles dos asientos y antes de la candidatura de Costa Rica solo se habían postulado Brasil y Venezuela, que finalmente ganaron las votaciones.
El presidente Alvarado dijo sentirse "complacido y orgulloso", y agradeció a los 96 países que votaron por Costa Rica y destacó el trabajo a contrarreloj que realizaron las misiones diplomáticas costarricenses en busca de apoyos.
"Por un margen muy estrecho no logramos el objetivo de estar en el asiento, pero sí logramos el objetivo de señalar lo que creemos es correcto, que no creemos conveniente que un país señalado por violaciones a los derechos humanos, en el caso del régimen de Venezuela esté en ese órgano", .
Fue una votación apretada, en la que la Venezuela del gobernante Nicolás Maduro, obtuvo el apoyo de 105 de los 193 países de la ONU y Costa Rica el de 96.
Costa Rica forma parte de un grupo de medio centenar de países que no reconoce a Maduro como presidente desde enero pasado cuando inicio su segundo mandato, pues consideran que el proceso electoral en el que alcanzó su reelección fue ilegítimo.
Brasil, que buscaba la reelección, se hizo con la otra plaza reservada al grupo de Latinoamérica y el Caribe al conseguir 153 votos a favor.
En las últimas horas, Gobiernos como los de Brasil o Chile habían llamado públicamente a frenar la candidatura venezolana, que también tuvo ante sí una fuerte campaña en contra por parte de Estados Unidos.
El Consejo de Derechos Humanos está formado por 47 países que cumplen mandatos de tres años y cuyos asientos se reparten en grupos regionales.
El pasado agosto, Venezuela se convirtió en el primer país latinoamericano en ser investigado por el propio Consejo de Derechos Humanos, que aprobó la creación de una comisión para estudiar los presuntos abusos del Gobierno de Nicolás Maduro.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, detalló en un informe presentado este año muchas de esas acusaciones y documentó al menos 6.000 muertes en operaciones de seguridad desde 2018.