La Comisión Europea ha propuesto un Certificado Verde Digital con el objetivo de agilizar la movilidad e impulsar el turismo en verano, principal fuente de ingresos de un buen puñado de países europeos, entre ellos España. Ni será verde ni sólo digital, pero tendrá código QR, y será bilingüe y gratuito. Ahora debe pasar el trámite legislativo comunitario –el visto bueno de los Gobiernos y del Parlamento Europeo– y la puesta en marcha de un mecanismo informático para que sea posible su emisión y lectura en todos los países de la UE antes de entrar en vigor.