Las turbulencias financieras empujan a los bancos centrales a frenar las subidas de los tipos de interés

Las turbulencias financieras originadas por el colapso del Silicon Valley Bank están empujando a los bancos centrales a frenar las subidas de los tipos de interés oficiales. Las rentabilidades de la deuda de Estados Unidos, Alemania o incluso de España con vencimientos a corto plazo caen con fuerza este lunes como reacción a los problemas de la banca y adelantan una menor agresividad del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal (Fed) en su lucha contra la inflación.

El interés que se exige en los mercados a la deuda norteamericana a dos años, la principal referencia para los plazos cortos, ha llegado a sufrir el mayor desplome desde el conocido como 'Lunes Negro' de la crisis financiera de 1987, de cerca de 0,30 puntos, hasta el 4,2%.

También han protagonizado fuertes retrocesos los rendimientos de la deuda de Alemania, de alrededor de 0,4 enteros, hasta el 2,6%, o la de España, en el mismo plazo de dos años.

Este vencimiento es una de las referencias sobre dónde esperan los grandes inversores (fondos, bancos, aseguradoras...) que estén los tipos de interés oficiales próximamente en cada región monetaria. Y con las caídas de este lunes están indicando que los bancos centrales frenarán los incrementos del 'precio del dinero' ante las turbulencias financieras que se han desatado y tras meses endureciendo las condiciones de financiación para luchar contra la inflación.

En el mismo sentido, el banco de inversión Goldman Sachs ha descartado recientemente que la Fed vuelva a aumentar los tipos de interés en su próxima reunión, que arranca el martes de la próxima semana y finalizará el miércoles. "A la luz de la tensión en el sistema bancario, ya no esperamos que realice una subida", anticipa la entidad, que previamente esperaba un incremento de 0,25 puntos, hasta el rango del 4,75%-5%.

Este nivel se desacoplaría de lo que está ocurriendo en los mercados, donde las caídas de las rentabilidad de la deuda soberana con vencimientos cortos responden a las compras de este tipo de deuda (en este mercado las compran suben el precio, y bajan el tipo de interés), que se producen por la incertidumbre existente.

La Fed y el BCE están siguiendo desde hace meses la estrategia de ahogar la demanda de las familias y la capacidad de inversión y de gasto de estados y empresas, y contener así las subidas de precios. Esta estrategia asume el riesgo de una recesión económica. Y, por tanto, de un aumento del desempleo y de sufrimiento para los hogares.

Como la semana pasada admitió fríamente el propio presidente de la Fed, Jerome Powell, cuando la senadora demócrata Elizabeth Warren le espetó que sus decisiones van a dejar a dos millones de personas sin trabajo en Estados Unidos, durante su comparecencia en la cámara alta del Congreso de la primera potencia mundial.

"Con este susto en el cuerpo, está garantizado el aumento del paro, y con ello una mayor debilidad económica", que es el antídoto de la banca central contra la inflación, segun incide Víctor Alvargonzález, fundador de Nextep Finance, quien advierte que de esto "tendrá que tomar buena nota el BCE si no quiere crear un problema mayor".

"Por eso caen los tipos de corto plazo, por la posibilidad, casi segura, de que apartir de ahora los bancos centrales moderen la agresividad, sopena de crear un problema económico mucho más serio. Y en un entorno donde los directivos dejan de contratar gente y moderan o detienen sus planes de expansión el descenso de la inflación está casi garantizado", insiste este experto.

Este jueves se celebra la reunión del BCE para la que avanzó una subidas de los tipos de otros 0,5 puntos, después de aumentarlos del 0% al 3% desde julio.

Este domingo, la Fed ya tomó una decisión contraria a la estrategia de los últimos meses, en respuesta al colapso de Silicon Valley Bank y Signature Bank: la creación de un fondo para garantizar el dinero de los depositantes de cualquier banco en Estados Unidos. "De este modo, se garantizan los depósitos y se fomenta que continúe la concesión de crédito", resumía este domingo la economista Judith Arnal, nombrada recientemente consejera del Banco de España.

"También es relevante la declaración conjunta del FDIC, la Fed y el Tesoro, indicando que quedan protegidos los depósitos de SVB y Signature Bank, sin suponer coste alguno para el contribuyente estadounidense", concluyó.