El Supremo ha fallado que no se puede obligar a los escolares a participar en clases con libros que entren en conflicto con las creencias religiosas de sus padres, además de respaldar la ley que exige la verificación de la edad en webs porno y fallar en contra de una organización cristiana que se oponía a que se les obligara a ofrecer medicamentos para prevenir la propagación del VIH
El Supremo de EEUU se alinea con Trump y limita los poderes de los tribunales para frenar su agenda ultra