El certificado verde europeo tiene ambición de ir más allá de las fronteras de los 27. O, al menos, sus tres elementos esenciales: estar vacunado, haber pasado el coronavirus o tener una PCR negativa. Y en tanto Estados Unidos está vacunando a su población con las mismas vacunas aprobadas por la Agencia Europea de Medicamentos –Pfizer, Moderna y Janssen, de momento–, la libertad de movimientos que se puede conceder a los europeos dentro de la UE sería también equivalente para los estadounidenses, algo en lo que está trabajando la Comisión Europea.