El próximo Gobierno deberá decidir el futuro de cientos de megavatios (MW) de energía hidroeléctrica cuyas concesiones han caducado o lo van a hacer en los próximos años. Entre 2023 y 2027 vencen más de 330 MW, a los que se suman concesiones que han expirado ya y siguen en manos privadas, y otros más de 500 MW que va a caducar entre 2027 y 2030 y cuya extinción podrá iniciar el futuro ejecutivo, según la normativa.
De acuerdo con los datos que el Ministerio para la Transición Ecológica facilitó en una respuesta parlamentaria en 2021, de aquí a 2030 la potencia que va a caducar supera los 850 MW.