“Tax de rich”. Es un reclamo mundial que permitiría engrosar las cuentas de los países y, con ello, mejorar los servicios públicos al mismo tiempo que se hace un reparto más equitativo de la riqueza. Y ese es el espíritu de un informe elaborado por el grupo de La Izquierda (GUE/NGL) que apuesta por la creación de un impuesto a las grandes multinacionales a nivel europeo. La idea es imponer una tasa progresiva de entre el 20 y el 40% a 209 compañías que permitiría recaudar unos 107.000 millones de euros.