Nora Osco y su pareja habían logrado conciliar el sueño. Al rato, ella escuchó lo que parecían golpes en la puerta. El susto le despertó y le hizo saltar de la cama. No podía imaginar que segundos después una horda de policías irrumpirían a la fuerza en su casa y les llevarían, tanto a ella como a su marido, detenidos con su bebé de 8 meses en brazos.
El destino de ambos fue la Dirección Contra el Terrorismo (Dircote), una unidad especializada de la Policía dedicada a operaciones de lucha contra el terrorismo, pese a que la Comisión de la Verdad y Reconciliación señala en su informe final que el conflicto armado cesó en el año 2000.