En cuestión de horas, estas webs de consulta habitual habían cambiado su necrónimo —su nombre de nacimiento, también conocido como 'deadname'— por su nombre actual. No pasó lo mismo, hace menos de un lustro, con las realizadoras y creadoras de la trilogía Matrix, Lana y Lilly Wachowski, cuyos procesos de transición no tuvieron una respuesta unánime, ni rápida de webs como Wikipedia o Filmaffinity. Las comunidades y los profesionales que sostienen estos portales parecen reaccionar ahora con mayor rapidez y sensibilidad, pero la nomenclatura y la identidad digital de las personas trans sigue siendo un terreno de disputa.
"Ha habido un cambio de sensibilidad en el tratamiento de temáticas trans, así como una toma de conciencia en la propia comunidad", explica Patricia Horrillo, coordinadora de Wikiesfera. "En el caso de Wikipedia somos comunidades de voluntarios los que hacemos las modificaciones y contribuimos a sus contenidos". Estas comunidades modifican los datos que reflejan la condición actual y veraz de la persona a la que se refieren los artículos biográficos, tanto si un político fallece como si un actor o actriz trans cambia su nombre. Sin embargo, el primer caso no genera discusiones internas pero el segundo sí.
"Como mínimo es síntoma de decencia en lo tocante a la gestión de datos. Supongo que esto se parece a la normalización y es indudablemente positivo", opina la historiadora, escritora y directora de teatro Alana Portero. "En cualquier caso, aunque es de agradecer, no deja de ser interesante que estamos aplaudiendo (yo la primera) que llamen por su nombre a una persona. Hasta ahora las vidas trans han sido tan mal tratadas que los mínimos están muy abajo".
"Hay una toma de conciencia sobre esta situación y una voluntad de ayuda a la visibilización no exenta de problemas. Es decir: la creación de artículos de personas LGTBI siempre ha tenido una cierta persecución, también en Wikipedia", explica Horrillo, porque la enciclopedia libre más consultada de Internet "no se salva de los sesgos que existen en otros espacios de la sociedad".
Según la experta en Wikipedia, hemos avanzado desde las hermanas Wachowski hasta Elliot Page: "Recuerdo una guerra de ediciones en los artículos de ellas dos: había editores que se negaban a poner su nombre en femenino, el nombre que ellas habían elegido". A pesar de todo, Horrillo asegura que "también hay colectivos sensibilizados dentro de la propia comunidad de editores de Wikipedia. Ha sido mucho trabajo de generación de artículos y biografías de personas LGTBI. Todo eso con el paso del tiempo, afortunadamente, va calando. Actualmente las comunidades son más porosas a todas estas cosas y reaccionan en positivo, mostrando su apoyo en la modificación de los artículos".
Alana Portero señala que, aún hoy, las hermanas Wachowski no figuran como tales en muchos sitios. "Sin lugar a dudas que hemos mejorado. Las personas trans, los activismos trans, hemos abierto ese hueco dejándonos mucho en el camino. Ha costado un esfuerzo terrible llegar, simplemente, a que se nos llame por nuestro nombre y a tener un mínimo de representación real, que sigue siendo muy poca. Todavía se nos discute lo del nombre, no te creas, con el mismo Elliot puedes ver prensa hoy mismo dando saltos mortales para justificar el uso de su necrónimo cuando no hace falta", dice.
Los procesos de transición de las hermanas Wachowski y de Elliot Page fueron muy distintos porque no existen dos iguales. Pero las tres figuras hollywoodienses comparten un activismo LGTBI que llevan ejerciendo desde hace años. Uno que les ha valido el favor de la comunidad LGTBI, pero también el rechazo de una industria que es aún más conservadora de lo aparente.
"Políticamente valoro la trayectoria de Elliot más que el anuncio en sí, del cual me alegro porque entiendo el lastre que ha debido llevar encima una persona que sale del armario trans a los 33 años", opina Portero. "Desde luego tiene mucho valor representativo una vida trans no adolescente. Es necesario visibilizar que eso es así, que la reflexión por la que las personas trans pasamos es muy profunda y puede tardar mucho tiempo en fraguar aún con todo a su favor, como es el caso de Elliot, un hombre no binario blanco y rico".
Y añade que "lo políticamente relevante es el activismo que ha desarrollado todos estos años, "su primera salida del armario, que le costó mucho en lo laboral, sus documentales, su presencia en cuanto la causa LGTB y feminista".
Además de figuras pertenecientes al ámbito del cine hollywoodiense, en el mundo de la música también se han dado ejemplos que han supuesto avances en términos de visibilidad trans, LGTBI o inclusión de personas de género no binario. Hablamos de artistas como Shea Diamond, Skylar Kergil, Teddy Geiger o Kim Petras entre muchos otros.
A estos nombres el pasado 6 de agosto se sumó el rapero y poeta Kae Tempest, que mediante un texto en Instagram afirmaba que iba a cambiar su nombre y sus pronombres porque era una persona de género no binario.
"He estado luchando por aceptarme tal como soy durante mucho tiempo. He tratado de ser lo que pensaba que otros querían que fuera, para evitar el rechazo. Pero esconderme de mí misma ha provocado todo tipo de dificultades en mi vida. Y este es un primer paso para conocerme y respetarme mejor", explicaba.
Hasta la redacción de este artículo en elDiario.es, en la Wikipedia en español no se reflejaba su nombre actual. Se la referenciaba como 'Kate Tempest' y en su descripción profesional aparecía como "poete, noveliste y rapere británice". En la comunidad de editores existe un debate abierto sobre el habla neutra, pero mayoritariamente se prefiere el uso normativo de masculino o femenino y los consensos aceptados por la Real Academia Española.
"Hay que tener en cuenta que en Wikipedia muchísima de la gente que contribuye es defensora de las posiciones de la RAE. Hay una rigidez en el lenguaje que es muy difícil cambiar", explica Patricia Horrillo. "Por otro lado, yo pienso que mantener ciertos estándares idiomáticos permite también que la propia Wikipedia no se convierta en un lugar poco serio a la hora de consulta", y añade que "Wikipedia no intenta ir por delante de consensos amplios ya establecidos".
Según Alana Portero, "la deuda que estamos acumulando con las personas no binarias conviene ir aliviándola lo antes posible. Son realidades que llevan entre nosotros toda la historia y no podemos seguir haciendo como que no es así. Lo que no hay son pronombres aceptados por la RAE y que se enseñen de forma oficial, pero las personas no binarias, en castellano, ya nos han descubierto el pronombre 'elle'".
Para la historiadora y escritora "no usarlo es cuestión de vaguería o vergüenza. Prefiero pasarla y tener que explicárselo a mis interlocutores que seguir invisibilizando a mis compañeres. No me cabe duda de que lo de Kae Tempest tiene que ver con esa pereza y con considerar a las personas no binarias trans de segunda".
Patricia Horrillo enseña a elDiario.es cómo se cambia la nomenclatura de una persona trans o de género no binario en Wikipedia.