La automovilística Seat cerró 2019 con un beneficio después de impuestos de 346 millones de euros, un 17,5 % más que el año anterior, una cifra récord que en su opinión le permite afrontar "con garantías" un 2020 en el que notará el impacto del coronavirus y de la caída de los mercados.
Los resultados de la marca española, filial del Grupo Volkswagen, siguen la línea positiva de los últimos cuatro años y el año pasado alcanzaron un volumen de negocio de 11.157 millones de euros, un 11,7 % más, gracias al impulso de las ventas, según las cifras facilitadas este miércoles por Seat.
El presidente de Seat y vicepresidente de Finanzas, Carsten Isensee, ha señalado que "trabajaremos de forma muy intensa para afrontar los distintos retos que afectarán a nuestro negocio", en especial los efectos del coronavirus, que en estos momentos "impide cualquier estimación fiable" sobre los resultados para 2020.