Aena obtuvo en el primer trimestre del año un beneficio neto de 23,1 millones de euros, lo que supone un reducción 83,1 % respecto al mismo período de 2019, como consecuencia de la crisis del coronavirus.

El gestor aeroportuario español ha atribuido este resultado a la reducción del tráfico aéreo en el mes de marzo y a la paralización de la práctica totalidad del negocio comercial en la red de aeropuertos, según explica en una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Entre enero y marzo, el tráfico de pasajeros en las instalaciones de Aena ha caído un 20,4 %, hasta los 42 millones.

No obstante, si se contabilizan los datos del Aeropuerto de Londres-Luton y de los seis aeropuertos de Grupo Nordeste de Brasil, la cifra de pasajeros de Aena asciende a 48,3 millones, un 19,8 % menos que en el mismo trimestre de 2019.

Los ingresos totales consolidados se situaron en 782,1 millones de euros, un 13,4 % menos respecto al primer trimestre del año pasado, donde destaca la caída del 14,7 % de la actividad aeronáutica que alcanzó durante el primer trimestre del año los 484 millones de euros.

Por otra parte, los ingresos comerciales dentro dela terminal cayeron casi un 16 %, con 209 millones de euros, mientras que la facturación por las actividades inmobiliarias repuntó un 7,6 %, hasta los 17,7 millones de euros.

En cuanto al negocio internacional, éste registró un aumento del 1,3 % de la facturación, hasta los 57 millones.

El resultado bruto de explotación (ebitda) del periodo descendió un 36,1 % hasta los 251,2 millones de euros, incluyendo 11,5 millones de euros de la consolidación de Luton y restando 0,7 millones de euros del Grupo Aeroportuario del Nordeste (Brasil).

El flujo de caja operativo ha alcanzado los 486,8 millones de euros, frente a los 583 millones del primer trimestre de 2019.

La deuda financiera de Aena se ha reducido hasta los 6.401 millones de euros -incluyendo la deuda financiera neta de Luton por importe de 476,3 millones de euros- frente a los 6.672 millones de euros al cierre de 2019. La ratio de deuda financiera a 31 de marzo de 2020, se ha mantenido estable en 2,4 veces, frente al consolidado a 31 de diciembre de 2019.