La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha asegurado este jueves que el futuro de la movilidad pasa por "el transporte público y colectivo seguro", circunstancia que "previsiblemente" llevará al Gobierno a "acompañar" al sector del automóvil en su transformación.

Durante su comparecencia ante la Comisión del Congreso, Ribera ha abogado además por trabajar para garantizar la viabilidad del sistema eléctrico, afectado "por la caída de los precios relativos y de la demanda", y ha anunciado que su departamento se reunirá con los municipios y provincias para estudiar si se compensa a las instalaciones turísticas respecto al canon de dominio público.

Se ha referido así a las "peticiones de distintos ayuntamientos, particulares y comunidades autónomas" sobre la posibilidad de que este año "hubiera un tratamiento distinto" para estas instalaciones ante la probable caída de la demanda y de la presencia de turistas, solicitudes en las que ya está trabajando la Dirección General de Costas.

"Si hay un esfuerzo fiscal colectivo asociado a la reducción o exención excepcional del canon, nos gustaría verlo también por parte de los ayuntamientos", ha recalcado la vicepresidenta cuarta, que ha defendido que "tendría poco sentido una facilitación por parte del Estado y no por los ayuntamientos, que a veces introducen cargos adicionales".

Respecto a la movilidad, ha destacado la importancia del transporte público para el futuro de las ciudades, lo que causará una "incidencia", esto es, "la transformación de un sector clave en la economía, tanto a nivel de empleo como del producto interior bruto (PIB), como es el de la cadena de valor de los automóviles".

Este hecho, ha añadido, llevará al Ejecutivo a acompañar al sector en el proceso de transformación estratégica en el que ya estaba inmerso, donde la previsión de evolución va hacia la movilidad eléctrica.

Ribera también ha defendido las restricciones puestas en marcha para contener la propagación del coronavirus, unas medidas de precaución que cree necesarias aunque "no es lo ideal": "Ojalá tuviéramos unos niveles que permitieran tener una progresiva pero rápida recuperación de la movilidad en las fronteras".

Asimismo, ha aludido al impacto que la pandemia ha causado en el sistema eléctrico, donde "se han alcanzado cotas muy bajas del precio mayorista del 'pool', prácticamente inimaginables, fruto de la gran presencia de renovables y de la enorme caída de la demanda tradicional".

De este modo, aunque "puede ser un alivio importante para las economías domésticas que cuentan con una tarifa regulada", la crisis ha puesto de manifiesto limitaciones que obligan a seguir trabajando en su sostenibilidad.

"Tendremos que abordar cómo se responde de manera segura, solvente, sin generar una presión desproporcionada a los consumidores vía fiscal, que no sería la receta, pero garantizando la viabilidad del sistema", ha explicado Ribera sobre una tarea que, en su opinión, es "fundamental de cara a la confianza de los inversores".