El grupo tecnológico nipón Softbank obtuvo una pérdida neta de 961.576 millones de yenes (8.293 millones de euros/8.972 millones de dólares) en su ejercicio fiscal 2019, cerrado en marzo, lo que le supone registrar un resultado negativo por primera vez desde hace quince años y el peor desde su fundación en 1981.
El consorcio atribuyó estos datos, entre otros factores, al mal comportamiento en algunas de sus inversiones, como la hecha en la firma estadounidense de oficinas compartidas WeWork, así como al impacto de la pandemia de coronavirus en sus operaciones.
Aun así, Softbank acabó el año fiscal, que concluyó el 31 de marzo, con unos ingresos netos de 6,19 billones de yenes (53.349 millones de euros/57.714 millones de dólares), un 1,5 % más que lo anotado en el ejercicio anterior.
En el ejercicio fiscal cerrado en marzo de 2019, el grupo Softbank anotó una ganancia neta de 1,41 billones de yenes (12.161 millones de euros/13.164 millones de dólares), y sus ingresos llegaron a 6,09 billones de yenes (52.510 millones de euros/56.838 millones de dólares).
El resultado operativo del ejercicio fiscal más reciente terminó con una pérdida de 1,36 billones de yenes (11.765 millones de euros/12.730 millones de dólares), frente a una ganancia de más de 2 billones de yenes en el ejercicio que cerró en marzo del año pasado.
Softbank informó de que las pérdidas operativas están ligadas fundamentalmente a la reducción en el valor de inversiones claves del consorcio, como en WeWork y Uber, ya sea directas a o través del fondo de capital de riesgo Vision Fund.
"El valor total de otras compañías del portafolio ha bajado significativamente en el cuarto trimestre (del año fiscal) debido fundamentalmente al impacto del brote de coronavirus", dice el comunicado que informa sobre los resultados.
Los datos facilitados por la firma indican que el patrimonio neto del grupo cayó en un 18 % durante el ejercicio fiscal recién concluido, hasta 7,37 billones de yenes (63.537 millones de euros/68.772 millones de dólares).