A pocas semanas de finalizar su mandato, la alta representante para Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, visitó México para dar un empujón al acuerdo comercial con la UE, cuyas negociaciones llevan más de un año estancadas.
"El propósito de mi visita estos días es tratar de empujar para que finalicen estas negociaciones", expresó este miércoles la jefa de la diplomacia europea en una conferencia en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Mogherini admitió que "las negociaciones están completadas excepto un asunto", el de la contratación pública para que las empresas puedan participar en licitaciones de ambos lados, lo cual lleva paralizado "un año y pocos meses".
"Ya estamos cerca, pero se puede estar cerca mucho tiempo sin avanzar. Así que mi mensaje es que tratemos de empujar este tema que queda pendiente", dijo la italiana cuestionada sobre el acuerdo comercial.
Durante su visita al país latinoamericano, Mogherini ha trasladado que dicho acuerdo es "extremadamente importante" para la economía, la cooperación, la vida de la gente y el mundo en general.
"Estoy positiva de que podemos firmarlo en los próximos meses. Es mi esperanza y mi ambición", expresó Mogherini.
La jefa de la diplomacia europea explicó que en las últimas horas se ha reunido con embajadores de Estados miembros de la Unión Europea en México que le han trasladado el apoyo a este acuerdo.
"Nosotros lo queremos y he escuchado que el lado mexicano lo quiere. Así que hagámoslo", sentenció Mogherini, cuyo mandato finalizará el próximo mes con la toma de posesión del nuevo equipo de gobierno de la Comisión Europea.
La UE y México están renegociando desde hace años el llamado Acuerdo Global, que entró en vigor el año 2000 y que contiene capítulos como las reglas de origen, el comercio de bienes, las medidas sanitarias y fitosanitarias, los derechos de los trabajadores, el respeto al medioambiente y la propiedad industrial.
El renovado acuerdo contempla liberalizar el sector agropecuario, algo que no había sucedido con el tratado del 2000, de manera que se eliminarán los aranceles en productos como los quesos, que ahora tienen tarifas del 45 %.
Y se protegerán algunos productos como el tequila mexicano o algunos quesos europeos.
Mogherini llegó este martes a la capital mexicana para un viaje de trabajo que finalizará hoy con una reunión a puerta cerrada con el canciller, Marcelo Ebrard, y el encuentros del martes con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, donde, entre otros asuntos, hablaron de migración y derechos humanos.
SOCIOS EN LA DEFENSA DEL MULTILATERALISMO
La diplomática aprovechó su visita para ofrecer una conferencia en la UNAM, la universidad más grande de América Latina, donde destacó que los colores azul y dorado de la bandera de la universidad coinciden con los de la UE.
"Compartimos cosas importantes", dijo entre risas.
Mogherini sostuvo que la UE y México coinciden en "valores fundamentales", puesto que ambos buscan un sistema internacional basado en la "colaboración", comparten la "preocupación" por la crisis climática y aspiran a una "democracia más justa e inclusiva".
"Queremos un sistema multilateral mientras otros mantienen una lógica de confrontación", dijo en velada referencia a Estados Unidos, China y Rusia.
Y añadió: "Aunque geográficamente estemos lejos, (la UE y México) estamos en el mismo lado de la historia".
Por ello, dijo que la UE no solo busca un renovado acuerdo comercial con México, sino también estrechar la cooperación política en los desafíos comunes y compartir estrategias para combatir el cambio climático y lograr un desarrollo sostenible.
Como ejemplo, recordó que la UE ha apoyado con siete millones de euros el plan del Gobierno mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para crear empleos en Centroamérica y frenar la migración forzada que atraviesa México hacia Estados Unidos.
Con todo, Mogherini dejará el cargo "satisfecha" por haber colocado a América Latina dentro de la agenda de la política exterior de la UE, como prometió en su última visita a México hace tres años.
"Prometí que pondríamos a México y a América Latina en el centro de la política exterior. (...) Creo que hemos cumplido esta promesa juntos", dijo a pesar de las crisis en Ucrania y Siria, que han centrado buena parte de la diplomacia europea en los últimos años.
En 2017, la UE exportó a México 38.000 millones de euros en bienes y 10.000 millones de euros en servicios, mientras que México exportó a los países comunitarios 24.000 millones de euros en bienes y 5.000 millones de euros en servicios, según datos oficiales de la UE.
La UE invirtió 13.250 millones de euros anuales en México en 2017, siendo su segundo mayor inversor por detrás de Estados Unidos, mientras que México invirtió 4.755 millones de euros en los países comunitarios.
Además, en México hay 28.000 empresas con capital europeo, que generan miles de empleos.