"La propuesta franco-alemana recoge parte de lo que propondrá la Comisión (...) Hay una especie de solapamiento temático parcial pero que claramente no es completo", ha expresado en una rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo comunitario, Eric Mamer.
Bruselas ha insistido en que el planteamiento de París y Berlín va "claramente en la misma dirección", pero ha reivindicado que su propuesta será "más amplia" e incluirá también "los diferentes elementos" del presupuesto de la UE (Marco Financiero Plurianual, MFF) para el periodo 2021-2027.
Mamer ha instado a "esperar unos días" hasta que el Ejecutivo comunitario "desvele" su borrador, algo que pretende hacer el próximo miércoles 27 de mayo.
"Deseamos la convergencia del conjunto de actores hacia una solución aceptada por todos", ha resumido el portavoz comunitario, quien ha insistido que la "herramienta central" de la propuesta será el MFF y el plan de recuperación será financiado a través de un incremento del techo de gasto del presupuesto europeo que dé más margen a Bruselas para emitir deuda.
Mamer ha reiterado que el planteamiento del Ejecutivo comunitario recogerá un "equilibrio" entre préstamos y subvenciones no reembolsables. La propuesta de Merkel y Macron, por el contrario, sugiere un plan de recuperación de 500.000 millones pero formado únicamente por transferencias directas y apuntalado por el compromiso de todas las capitales de diseñar reformas económicas "sólidas".
La idea de París y Berlín fue bien acogida por países del sur como España e Italia, pero no tardó en recibir críticas por parte de los países del norte. En concreto, Austria, Países Bajos, Dinamarca y Suecia siguen exigiendo que los fondos de este plan de relanzamiento económico sean trasferidos a través de préstamos que los gobiernos tengan que devolver.