El comité de expertos propone una subida del salario mínimo de entre el 1,3% y el 2% en 2021 en pleno debate en el Gobierno

Alcanzar un salario mínimo interprofesional (SMI) en España de entre 1.011 y 1.049 euros al mes para cumplir con la recomendación europea. Es la conclusión del comité de expertos y expertas creado por el Ministerio de Trabajo para definir cuál es la meta en España del 60% del salario medio a la que el Gobierno se ha comprometido llevar el SMI al final de la legislatura, en el año 2023, para así adecuarse a lo que propone Europa.

La comisión asesora recoge además sus propuestas de senda de subida para los próximos tres años, desde los 950 euros al mes actuales, que era el segundo de sus encargos. Plantea diferentes incrementos en este periodo, con un aumento ya en 2021 incluso en el escenario más "prudente" por la pandemia, que va del 1,3% al 2%, unos 12 a 19 euros al mes. No obstante, los especialistas recuerdan que el Gobierno es quien debe decidir y apuntan que existe una "alternativa" de concentrar más el aumento en 2022 y 2023, aunque no la concretan.

Cuando se ha desatado el 'segundo asalto' en el Ejecutivo de coalición en la batalla sobre si subir o no el SMI este año, la comisión asesora creada por el Ministerio de Trabajo, con presencia también del Ministerio de Hacienda y el de Economía, ha concluido su tarea de definir cuál es la meta a la que debe aproximarse el SMI para situarse en el objetivo del 60% del salario medio y, en segundo lugar, qué recomendaciones propone para aproximarse a esa cifra.

La vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha celebrado que el debate sobre el SMI se base en "la evidencia científica", para lo que ha anunciado que mantendrá esta comisión de especialistas durante su mandato. Díaz ha anunciado que se reunirá próximamente con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para abordar el incremento del SMI este 2021. Negociará esta cuestión directamente con el presidente del Gobierno y no con la vicepresidenta económica, ha apuntado.

Los expertos se inclinan en sus dos escenarios cuantificados en el estudio por la subida este 2021, ya sea de mayor o menor calado. Aun así, recuerdan que es el Ejecutivo es que debe decidir y "otra alternativa discutida dentro de la comisión es que se llegase a acordar, ante la crisis económica y social provocada por la pandemia y la incertidumbre que ha traído consigo, concentrar aún más las subidas del SMI en 2022 y 2023".

La economista Inmaculada Cebrián López, relatora de la comisión de expertos y expertas, ha sido la encargada de explicar la senda propuesta de subida. En su planteamiento más "prudente" dada la situación actual de pandemia, los especialistas sugieren incrementos del SMI en los tres años, 2021, 2022 y 2023, pero optan por que se retrase "la parte principal del aumento" para los dos últimos años dada la "incertidumbre" actual. El alza del SMI planteado para 2021 varía entre el 1,3% y el 2% en este escenario más "prudente", que se traducen en un aumento de entre 12 y 19 euros al mes.

El informe cuantifica además otra tabla de incrementos propuesta, basada en las previsiones de crecimiento del PIB para los próximos tres años, que en 2021 es del 6,5%. Esta propuesta centra los mayores incrementos del SMI en 2021, con un alza superior respecto a 2022 y 2023. Aquí, los incrementos planteados para 2021 van del 2,5% al 4%.

La comisión de expertos se refiere al informe del Banco de España, que evaluó el efecto negativo en el empleo del incremento del SMI del 22% en 2019. Inmaculada Cebrián López ha destacado que el análisis del Banco de España ha servido al grupo de trabajo y "encaja perfectamente" con la propuesta de subida del salario mínimo de su estudio. "La evidencia disponible parece indicar que la sensibilidad del empleo ante subidas en el salario mínimo es relativamente baja", apunta el estudio, "pero es esperable que exista un nivel salarial (medio o mediano) a partir del cual esta sensibilidad aumente, haciendo menos efectiva esta herramienta como mecanismo para aumentar la masa salarial de los trabajadores de bajos salarios".

La doctora en Economía y relatora de la comisión ha recordado que el impacto en el empleo es solo uno de los factores a tener en cuenta a la hora de decidir el alza del SMI, pero que también son importantes otras variables como la reducción de la pobreza y el efecto del SMI en favor de la igualdad, ya que las mujeres son las que reciben los salarios más bajos.

Los doce especialistas recuerdan además que, junto al impacto a corto plazo en el empleo de la subida del SMI, negativo según lo analizado por el Banco de España y la AIReF, "a medio plazo cabe esperar un efecto de segunda ronda que incrementaría el empleo y el colectivo de beneficiarios del salario mínimo", debido al incremento de renta de los trabajadores con remuneraciones más bajas, que suele derivar en el aumento de su consumo y, por tanto, de la demanda económica.

El debate está abierto en el Ejecutivo, que congeló el SMI a comienzos de 2021 por la crisis de la COVID, como defendía la vicepresidenta económica Nadia Calviño y en contra del criterio de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. El Gobierno dijo que a mitad de año volverían a analizar la situación. Llegado junio, las posturas entre Calviño y Díaz siguen siendo las mismas. El presidente del Gobierno, quien inclinará la balanza de nuevo en un sentido u otro, ha enfriado esta semana la posibilidad de subida este 2021 los mismos argumentos que utiliza la vicepresidenta económica.

Yolanda Díaz ha recordado que la postura de su Ministerio a favor de la subida este año "es conocida", para actuar como ha hecho la gran mayoría de países de la UE (salvo cuatro, incluido España), seguir combatiendo los salarios bajos en el país y, además, evitar que este grupo de trabajadores con menores remuneraciones sufra una pérdida de poder adquisitivo dado el auge de la inflación.

La ministra de Trabajo ha cargado con contundencia contra la vicepresidenta Calviño y su defensa de mantener congelado el SMI para no afectar a la creación de empleo. Aunque no la ha mencionado directamente. "No contrapongamos el crecimiento del empleo a la subida del SMI. A veces, y por eso es tan importante esta comisión de expertos, nos juega malas pasadas la ideológica. Es muy respetable, en el seno del Gobierno hay personas que cuando crecíamos más que nunca pensaban que era malo subir el SMI. Y hay personas, como yo misma, que lo pensaba [que había que subir el SMI] el año pasado y lo sigo pensando hoy", ha afirmado.

"No confundamos la ideología con la ciencia y con lo que debemos de hacer", ha añadido la vicepresidenta tercera, que ha destacado que el comité asesor recomienda la subida este 2021 con escenarios de "máxima prudencia". El SMI, ha destacado Díaz, es una "variable de calidad para fomentar la demanda interna" y combatir males como la pobreza en España y la desigualdad de género.

La primera misión de la comisión era situar cuál es el 60% del salario medio. Un objetivo que puede parecer sencillo, pero que no lo es tanto por varios motivos. Entre ellos, la gran disparidad de estadísticas que miden los salarios en España y la alteración que supone la crisis del coronavirus en 2020. Tras un análisis de las distintas fuentes estadísticas, sus pros y contras, el informe se decanta por la Encuesta Anual de Estructura Salarial (EES), que cuenta con los últimos datos oficiales de 2018.

Con este punto de partida, los especialistas hacen una proyección para actualizar el salario medio en 2020 a partir de tres escenarios: según se considere que en 2020 los salarios medios no varían, que aumentan como el sueldo de los empleados públicos y las pensiones al principio del año siguiente (0,9%) y que aumentan conforme a la información recogida por la estadística de convenios colectivos.

Desde el SMI actual de los 950 euros mensuales en 14 pagas, el objetivo del 60% del salario medio en España queda así los 1.011 euros brutos al mes, en el escenario en el que no suben los salarios en España en 2020, y los 1.049 euros brutos al mes en el escenario de mayor aumento de los sueldos. Por lo tanto, en los próximos tres años se tendría que plasmar ese aumento del SMI de los 61 a 99 euros mensuales en términos absolutos.