El Banco de España ha explicado que la revisión de la previsión de crecimiento económico para 2019 que hizo en junio, elevada del 2,2 al 2,4 %, fue consecuencia de la revisión al alza de los datos de contabilidad nacional del primer semestre y no de una mejora de las perspectivas para la segunda mitad del año.
En un artículo analítico publicado este miércoles sobre proyecciones y análisis macroeconómico, la entidad explica que la actualización de las previsiones recoge cambios a pasado, por la publicación de nuevos datos de contabilidad nacional de trimestres anteriores, y cambios a futuro, por la mejora o empeoramiento de las perspectivas de crecimiento hasta el final del ejercicio.
El artículo detalla la relevancia que para el crecimiento de un ejercicio tiene la evolución del PIB en el año previo, lo que denomina el "efecto arrastre" de la economía.
Dado que el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revisado esta semana a la baja el avance del PIB en 2018 y en el primer semestre de 2019, cabe pensar que las próximas proyecciones macroeconómicas del Banco de España, que se presentarán el martes 24 de septiembre, podrían incluir una rebaja de la previsión de crecimiento del 2,4 % prevista para este año.