El ministro de Infraestructura de Brasil, Tarcísio Gomes de Freitas, aseguró este viernes en Nueva York que su "gran reto" al frente de esa agencia es el volumen de trabajo que tienen por delante, con el plan que busca una inversión de 50.000 millones de dólares en los próximos tres años.
Es precisamente ese proyecto el que le trajo a Nueva York, donde durante una semana sostuvo reuniones con posibles inversores para el desarrollo de aeropuertos, líneas de ferrocarriles, puertos y autopistas, que tildó de "productivas y satisfactorias".
"Creo que el gran reto es el volumen de trabajo que se necesita hacer, pero sabemos cómo hacerlo, lo hemos hecho antes, hemos hecho 26 subastas este año.
"Solo necesitamos centrarnos en la cartera de proyectos para que sigan avanzando y llevarlos a subasta", indicó Gomes de Freitas, que realiza una gira por varias ciudades para presentar el plan y que en dos semanas le llevará a España.
Brasil también llevará su propuesta al Reino Unido y a China, su principal socio comercial.
Precisamente, como parte de este proyecto, Gomes de Freitas firmó un memorando de entendimiento el pasado 2 de agosto que fue suscrito también por el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross.
El memorando compromete directamente a la Corporación de Inversión Privada en el Extranjero (OPIC) de Estados Unidos, que cuenta con cerca de 60.000 millones de dólares en recursos para invertir en países emergentes, y al Programa de Asociaciones e Inversiones (PPI) de Brasil.
"Es un plan bien comprensivo, con proyectos para todo el país, que traerán servicios de alta calidad ya sea para la agroindustria, las regiones industriales y comercio", dijo, a través de un intérprete, al defender el plan de inversión del Gobierno de Jair Bolsonaro.
Como parte del material entregado a los inversores, Gomes de Freitas aseguró en un mensaje que esas 26 subastas ya adjudicadas "son una clara demostración de confianza en el mercado de Brasil".
Indicó además que los inversores con los que se reunió en la semana estuvieron interesados en saber cómo se enfrentarían los riesgos con cada proyecto, cómo serían manejados y resueltos.
De acuerdo con el ministro, existe un nivel de riesgo que ya el Gobierno ha identificado, además de cuáles serán asumidos por el sector público y cuáles por el sector privado.
"Querían tener claro cómo serían abordados y resueltos los riegos de cada contrato", afirmó.
Gomes de Freitas explicó que en los próximos tres años serán firmados los contratos por un total de 50.000 millones de dólares, para una inversión en el país a lo largo de 30 años.
Destacó que todos los contratos deben estar precedidos por el proceso de subastas y se mostró confiado en que los inversores de Nueva York participarán del proceso.
"Parece que hay gran interés en nuestros bienes. Hicimos una promoción de nuestro plan pero tenemos que seguir un procedimiento. En los próximos tres años habrá subastas en las que competirán las empresas", para invertir en nuevas obras o aumentar la capacidad de la infraestructura y administrar los bienes durante 30 años.
El rol del Gobierno será el de estar atento a que se cumplan esos contratos, que el desarrollo sea lo acordado y que se entreguen a tiempo, lo que llevará a que el pueblo gane una infraestructura y servicios de calidad, destacó.