La reforma de las pensiones sale adelante por amplia mayoría en el Congreso pese al rechazo de PP, Ciudadanos y Vox

Gran respaldo al cierre de la reforma de pensiones en el Parlamento. El Gobierno ha logrado la convalidación del decreto con el apoyo de una amplia mayoría de los partidos políticos, aunque con el rechazo de la derecha parlamentaria de PP y Ciudadanos y también de Vox en su discurso, aunque se ha abstenido en la votación. El ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha defendido la legislación pactada con los sindicatos mayoritarios, y de la que se descolgaron los empresarios, sobre la que ha destacado que garantiza la sostenibilidad del sistema "a corto, medio y largo plazo" además de reforzar la protección de "la mayoría social" del país, eliminando "la incertidumbre de los recortes a los pensionistas presentes, pero sobre todo a los del futuro" que suponía la reforma del PP de 2013.

El resultado de la votación ha sido de 179 votos a favor, sustentado en el bloque de la investidura (PSOE, Unidas Podemos, Más País, Compromís, PNV, ERC, EH Bildu y PDeCAT, entre otras), así como 104 votos en contra, principalmente de la derecha de PP y Ciudadanos y algunas nacionalistas, como la CUP y BNG. Vox, con una intervención en contra de la norma, se ha abstenido en la votación.

"En estos cuatro años hemos demostrado que las reformas pueden traer avances y no recortes, traer derechos y no dolor", ha sostenido Aina Vidal, de Unidas Podemos, que ha destacado también la reforma laboral contra la temporalidad abusiva. Mercè Perea, del PSOE, ha insistido en que solo con acuerdos "se mantiene la paz social" y las "reformas perduran a futuro".

El ministro de la Seguridad Social ha detallado en el Congreso los elementos centrales de la norma, con medidas como la elección de un periodo de cómputo opcional durante las próximas dos décadas, un gran refuerzo de los ingresos del sistema a través de las cotizaciones sociales, sobre todo de los salarios más altos, y medidas para reducir la brecha de género y el aumento de las pensiones más bajas. Estas últimas, con acuerdos de última hora con ERC (reducciones para cuidar) y con EH Bildu (viudedad), que se prevén incorporar en la tramitación como proyecto de ley, que también se ha acordado esta mañana.

De cara a los jóvenes, el ministro ha subrayado la importancia de la derogación de las dos claves de la reforma del PP (las subidas del 0,25% anuales y el factor de sostenibilidad, que no llegó a desplegarse nunca), que provocarían recortes superiores al 30% en las pensiones futuras de los jóvenes de hoy. Como contrapartida, la reforma aumenta el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), un pequeña cotización de todos los trabajadores en las próximas décadas, que se situará en el 1,2%.

Frente a las críticas de la derecha sobre la insostenibilidad de la Seguridad Social y de la propia reforma, el ministro José Luis Escrivá ha destacado que la reforma es "muy rigurosa técnicamente", para lo que ha recordado la atenta mirada de Bruselas en su cierre. Además, ha avecinado que será "una referencia" a nivel internacional al suponer "un cambio de paradigma" en España y en Europa por el que la sostenibilidad del sistema se aborda desde una lógica de aumento de los ingresos en lugar de a través recortes de las prestaciones.

La mayoría de la izquierda parlamentaria, así como algunos partidos como PNV, han valorado el cambio de rumbo en esta reforma de pensiones del Ejecutivo de coalición para hacer frente al reto de la jubilación de la generación del 'baby boom' a través del refuerzo de los ingresos del sistema, como piden desde hace años los sindicatos, en lugar de apostar por las soluciones imperantes, que avocaban a la reducción del gasto y, por tanto, de las pensiones futuras.

Con medidas como el aumento de las pensiones mínimas del sistema, la cotización para todos los becarios y la mejor cobertura de cotización de las lagunas en la carrera laboral, así como de las reducciones y excedencias por cuidado, entre otras medidas, varias formaciones progresistas han destacado que la norma suponga "un avance de derechos" y "un viraje a la izquierda" en las políticas sobre pensiones.

Varios grupos parlamentarios, como EH Bildu y ERC, ha valorado la disposición de negociar del ministro José Luis Escrivá, que ha supuesto la inclusión de algunas de sus reclamaciones, lo que ha permitido el apoyo de sus grupos a la norma este jueves. El decreto se tramitará además como proyecto de ley, para poder incluir algunos cambios, algo que también ha reconocido el PNV, que tratará de incluir alguna medida.

"Han sido meses de intenso y constante trabajo, no exento de dificultades, pero sobre todo con aportaciones constructivas de los implicados en todo el proceso", ha agradecido por su parte el ministro.

Los negociadores de los sindicatos, Carlos Bravo (CCOO) y Cristina Estévez (UGT), han asistido al pleno del Congreso y han celebrado la convalidación del decreto. "Es una reforma que refuerza la equidad y que redistribuye la riqueza", ha destacado Bravo, que ha subrayado que la legislación vela por "las generaciones más jóvenes", que eran las más perjudicadas por los recortes de la legislación de 2013. Estévez ha apuntado al debate parlamentario y las votaciones para que los ciudadanos comprueben "quién está a favor de los ingresos, de un sistema público de pensiones y quiénes abogan todavía por los recortes".

PP y Ciudadanos han votado en contra de la reforma, y Vox se ha abstenido con un marcado discurso en contra, porque todas ellas han sostenido que no garantizará la sostenibilidad del sistema de pensiones a futuro y han acusado al Gobierno de "engañar" a la población. Desde el PP, el diputado Jaime de Olano, ha destacado que la reforma es una "patada hacia delante" al reto de la sostenibilidad del sistema, que ha dicho que supondrá "recortes de salarios o de pensiones" en 2025.

En este sentido se ha pronunciado también Alberto Núñez Feijóo, que ha afirmado que su propuesta para el futuro de las pensiones se basa en "empleo, empleo y empleo". José Luis Escrivá ha criticado en una entrevista en Al Rojo Vivo que el líder del PP apuesta por "el populismo en estado puro" al decir que quiere subir las pensiones con el IPC, pero no ofrecer ninguna medida concreta para hacer posible el aumento del gasto derivada de esta decisión. "Le sugiero que vaya a Bruselas y se lo cuente", ha afirmado Escrivá.

Las fuerzas de la derecha han destacado los estudios que indican que la reforma aumentará el déficit del sistema, como ha apuntado en su escenario base la AIReF y el Instituto de Actuarios Españoles, y han afirmado que "perjudicará al empleo", como apuntan algunos organismos de estudios más conservadores, así como desde la banca y las aseguradoras.

Desde el PSOE, Mercè Perea ha recordado que la norma "viene avalada por la Comisión Europea", por lo que ha insistido en su garantía a futuro. "Ustedes querían hacer negocio y con esta reforma ya no pueden", ha criticado Perea a la bancada del PP.

Con el eco de las movilizaciones masivas en Francia contra la reforma de pensiones que pretende imponer Macron, desde Ciudadanos se han celebrado como el "único partido" que dice con claridad que el sistema público es insostenible y han criticado al PP de Alberto Núñez Feijóo por respaldar la subida de las pensiones según los precios y le han acusado de que no se atrevería "a hacer lo que está haciendo Macron".