El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha aprobado en su pleno de este miércoles, el Plan de Acción Nacional sobre gestión del envejecimiento de las centrales nucleares, tras la revisión temática por organismos homólogos.
La aprobación del documento responde a la Conclusión adoptada por el Consejo Europeo y a la indicación fijada por el Grupo Europeo de Reguladores de Seguridad Nuclear (ENSREG) el pasado marzo.
En esa fecha, según un comunicado del CSN, se estableció que los países que hubiesen participado en la primera revisión temática realizada por homólogos (Topical Peer Review - TPR), debían publicar sus planes de acción correspondientes a finales de septiembre.
La Directiva 2014/87/EURATOM recoge en el artículo ocho los TPR, y reconoce la importancia de las revisiones por homólogos como herramienta para la mejora continua de la seguridad nuclear.
Según la directiva, "los Estados miembros velarán porque existan disposiciones que permitan que la primera revisión temática de las centrales por homólogos se inicie en 2017 y que las posteriores revisiones temáticas ínter pares se realicen al menos cada seis años".
En cumplimiento con esa legislación, el CSN preparó en 2017 el Informe Nacional de Evaluación que recogió el análisis de gestión del envejecimiento global aplicable por las centrales nucleares españolas en base a la regulación existente en España, así como su adaptación específica para los sistemas, estructuras y componentes seleccionados.
Un equipo de homólogos al CSN realizó 134 preguntas y, basándose en las buenas prácticas y oportunidades de mejora que recibieron, y la información facilitada por los titulares de las instalaciones nucleares, el regulador elaboró el Plan de Acción Nacional que ha sido aprobado hoy por el pleno.
En ese Plan se establece un calendario de acciones que deberán llevar a cabo los titulares con la supervisión del CSN.
Las acciones están relacionadas con el cableado eléctrico, la presión de la vasija del reactor y las tuberías enterradas o de acceso restringido.