La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Economía, Comercio y Apoyo a la Empresa, Nadia Calviño, ha avanzado este viernes que, además del impuesto extraordinario a las compañías energéticas, también se revisará el impuesto a la banca "teniendo en cuenta que las circunstancias han cambiado" y ya no se está ante el mismo escenario de tipos de interés.
"Me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar algunos los parámetros en el nuevo escenario en el que estamos, en el que ya no hay esa subida tan rápida de los tipos de interés y esa subida tan rápida de los precios de la energía.
Por su parte, la vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha expresado su "total desacuerdo" con esta medida y ha señalado que seguirá defendiendo "el mantenimiento del impuesto a entidades financieras y a las energéticas". En declaraciones a los medios, la líder de Sumar ha insistido en que los acuerdos suscritos entre el PSOE y Sumar para la formación del Gobierno de coalición defienden que "en momentos de crisis de inflación sin precedentes, los que más tiene son los que más tienen que aportar" y ha apuntado a que los datos de beneficios de las energéticas y de las entidades financieras son absolutamente contundentes.
"Lo que no puede hacer un Gobierno de coalición progresista es mantener la carga impositiva sobre los trabajadores y, sin embargo, a los que tiene importantes beneficios, cantidades extremas, resulta que vamos a ser complacientes con ellos", ha indicado Díaz, insistiendo en que estos términos están incluidos en el acuerdo de Gobierno.
La vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendió esta semana tras el Consejo de Ministros que el Gobierno llevará a cabo una reforma del impuesto a las eléctricas para "incentivar sus inversiones en electrificación". En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Montero recordó que “el diseño de este impuesto era temporal” y ha explicado que tras los acuerdos del Gobierno de coalición el tributo requiere “algunos ajustes”. “Queremos con esta figura mandar un mensaje al sector energético, al sector eléctrico, para que continúe los proyectos de inversión que permitan acelerar el ritmo de transformación de nuestras fuentes energéticas”.
La vicepresidenta primera ha defendido que el Gobierno "hizo muy bien en poner esos impuestos en ese momento, que además han cumplido con la recaudación prevista por Hacienda y servido de ejemplo para otros países europeos.
"Creo fue una buena decisión. Igual que ahora me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar (...) Siempre lo hemos dicho, que íbamos a hacer el análisis de esos dos impuestos para ver si hay que mantenerlos de cara al futuro y con qué parámetros, de cara a que sigan teniendo el mismo impacto positivo desde el punto de vista de la recaudación y desde el punto de vista económico", ha precisado Calviño.
El acuerdo de la coalición entre PSOE y Sumar abogaba por revisar estos dos impuestos para "readaptarlos y mantenerlos". Este 2023 es el último de los ejercicios en el que está vigente este impuesto tal y como fue redactado hace un año, aunque su recaudación se ingresará durante el próximo año, teniendo en cuenta los resultados de las empresas de este ejercicio.