Un total de 1.018 trabajadores del Banco Santander que se acogieron al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) aprobado por la entidad y los sindicatos el pasado mes de junio ya han abandonado el banco y, de ellos, la mayoría corresponden a Madrid (280) y Sevilla (70).
Según los datos facilitados la semana pasada en la comisión de seguimiento del ERE, según UGT, en Barcelona se han producido 54 salidas, en La Coruña, 53; en Valencia, 50; en Cantabria y Valladolid, 29; en Asturias y Vizcaya, 27; en Málaga, Pontevedra y Las Palmas, 24; en Alicante, 22; y en Santa Cruz de Tenerife, 20.
En Toledo 19; en Cádiz, 18; en Murcia y Zaragoza, 17; en Badajoz y Guipúzcoa, 14; en Baleares y Granada, 13; en Córdoba y Álava, 12; en Gerona, 11; y en León, Castellón, y Almería, 10.
En Orense se han producido 9 salidas; en Burgos, Navarra, y La Rioja, 8; en Albacete, Salamanca, y Cáceres, 7; en Guadalajara, 6; en Hueva, Lugo, Palencia y Huesca, 5; en Cuenca y Soria, 3; en Ciudad Real y Jaén, 2; y en Ávila, Lérida, Tarragona, Teruel, y Zamora, 1.
Del total de las salidas, 318 eran mujeres, y 700 hombres.
Según los datos facilitados en la citada reunión, en total, casi 2.000 personas se han apuntado al ERE del Santander, que prevé la salida de 3.223 personas.
Hasta mediados de septiembre ya han abandonado el banco esos 1.018 trabajadores y quedan otras 969 que fueron aceptadas y aún están pendientes de ejecutar.
El pasado mes de junio, el Santander y los sindicatos firmaron el acuerdo sobre el ERE del grupo en España, que también llevaba aparejado el cierre de 1.150 oficinas.
Según los mismos datos, ya han echado el cierre 1.128 sucursales.
El acuerdo alcanzado entre la entidad bancaria y los sindicatos establecía que los trabajadores de los servicios centrales y del centro corporativo tenía de plazo para apuntarse de forma voluntaria al ERE hasta finales de julio; los de la red comercial, hasta el 15 de noviembre, y los de RRHH, control de red o riesgos, hasta el 31 de enero de 2020.
En servicios centrales y el centro corporativo se han producido 470 adhesiones al ERE (121 mujeres y 294 hombres), y de ellas han sido aceptadas 415.
Las 55 adhesiones restantes fueron rechazadas.
También se han producido trece despidos forzosos, según UGT.