El Gobierno municipal de Barcelona y los grupos de ERC y JxCat han acordado pedir al Govern que modifique la ley sobre el impuesto de las estancias en establecimientos turísticos de forma que la ciudad pueda aplicar un recargo, de hasta un máximo de 4 euros, que recaudaría íntegramente el consistorio.
Se trata de una propuesta impulsada por ERC que ha logrado el apoyo de los grupos de Barcelona en Comú, el PSC y JxCat y que el pleno ha aprobado con el voto en contra de los de Ciudadanos, PP y Barcelona pel Canvi.
Una vez aprobada la proposición, el acuerdo se eleva ahora al Parlamento de Cataluña, a quien la propuesta insta a modificar la ley del impuesto sobre las estancias en establecimientos turísticos para que el recargo aprobado hoy se pueda materializar.
El recargo se aplicaría a las pernoctaciones y desembarcos de cruceristas que se hagan en la ciudad y se sumaria al 50 % de lo recaudado por la Generalitat con la tasa que ya recibe el ayuntamiento.
El acuerdo entre los grupos municipales dibuja una mayoría que podría sacar adelante los presupuestos municipales de manera ordinaria, algo que no ocurrió en ningún ejercicio del mandato pasado.
Los cuatro grupos se han mostrado confiados en que la petición del consistorio barcelonés sea atendida con celeridad por la Generalitat -prevén que se pueda aplicar ya en 2020-, dado que tanto ERC como JxCat participan del Gobierno catalán de coalición.
Los cuatro grupos han destacado que las pernoctaciones turísticas crecen a un ritmo del 8 % anual acumulativo y que se estima que sean de 30 millones por año.