El líder del Partido Popular sostiene que el acuerdo entre empresarios y sindicatos es un "aval suficiente" para apoyar la norma, lo que garantiza su aprobación
Jubilación demorada, activa y parcial: las claves de la última reforma de pensiones pactada por el Gobierno
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha confirmado este lunes que su formación apoyará la última reforma de pensiones, como adelantó elDiario.es el pasado octubre, con fuentes de la dirección del partido.
La postura del PP respecto a esta nueva reforma de pensiones, con cambios en la jubilación parcial, demorada y activa, es un hito relevante. No solo porque garantiza la convalidación del real decreto-ley, en un contexto de compleja lógica parlamentaria, sino porque supone además un viraje en la actitud del principal partido de la oposición respecto a las leyes presentadas por el Ejecutivo de coalición.
Feijóo ha explicado este lunes que el pacto en el diálogo social justifica el apoyo del PP a la norma. “Hay un acuerdo y, aunque creemos que esos acuerdos se deben negociar en la Cámara, entendemos que es un aval suficiente para que el PP se posicione a favore de ese real decreto-ley”, ha afirmado.
Ese acuerdo social, por el que los sindicatos mayoritarios reclamaban al PP que apoyara la norma, no ha sido impedimento sin embargo para que el PP rechazara en el pasado otras muchas reformas pactadas por el Gobierno, tanto de pensiones como en otras materias laborales. Por ejemplo, el primer bloque de cambios que volvió a ligar la subida de las pensiones al IPC, en el que el PP votó en contra. O la reforma laboral, que salió adelante por la mínima, tras el viraje sorpresa de los parlamentarios de UPN y gracias al voto equivocado de un diputado del PP.
Los líderes de los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, desvelaron en octubre que habían reclamado a Feijóo el apoyo a este último acuerdo de pensiones, que no estaba garantizado en un contexto cada vez más complejo para la aprobación de leyes en el Congreso. Algunos socios del Gobierno, como ERC, BNG y EH Bildu, habían expresado algunas diferencias y exigían “cambios” al Ejecutivo.
En la patronal de empresarios CEOE no se han pronunciado sobre si Antonio Garamendi trató con el líder del PP este tema, aunque en la organización empresarial siempre defienden que “se hacen responsables” de los acuerdos que firman.
Jubilación parcial, contrato relevo y másEl último acuerdo sobre pensiones incluye varias medidas que incentivan la compatibilidad de la pensión con el trabajo, como el adelanto del acceso a la jubilación parcial, reconoce más derechos a los contratos de los relevistas y fomenta el retraso voluntario del retiro, a través de un aumento de los incentivos a la jubilación demorada, entre otras medidas.
Aunque el acuerdo social con sindicatos y empresarios se alcanzó en verano, el Gobierno no aprobó el real decreto-ley con todos los cambios hasta finales de diciembre. Los sindicatos urgían al Ejecutivo a aprobar la norma antes de que terminara el año, por la prórroga de las condiciones más ventajosas en la jubilación parcial y el contrato relevo en la industria manufacturera, que expiraban el 31 de diciembre.
Sin embargo, la incertidumbre sobre los apoyos parlamentarios a la norma demoraron su aprobación en el Consejo de Ministros hasta el último momento. Este lunes, el anuncio del PP supone la garantía de la que la reforma será convalidada, aunque alguno de los socios del Gobierno se desmarcara de la norma.
Como publicó elDiario.es en octubre, el Partido Popular había condicionado su apoyo a que el acuerdo de pensiones se aprobara “limpio” en una norma, es decir, sin que el Ejecutivo añadiera otras materias en el real decreto.
Los sindicatos CCOO y UGT han trabajado por un apoyo amplio a la reforma, que defienden no solo por las medidas sobre la jubilación que se plantean a futuro, sino también por las mejoras planteadas para trabajadores como los relevistas y las personas con contratos fijos discontinuos.