Las actas de la última reunión del Consejo de Gobierno de la institución monetaria en diciembre, en la que decidió la cuarta bajada de los tipos de interés de 0,25 puntos, hasta el 3%, recogen que algunos gobernadores pidieron un recorte mayor
El BCE abre el melón de los tipos de interés “neutrales” para ver si el suelo está por debajo del 2%
El Banco Central Europeo (BCE) renunció a un recorte de los tipos de interés de medio punto de golpe en diciembre para no dar una visión de la economía “peor de lo que realmente es”.
“Algunos miembros del [Consejo de Gobierno] señalaron que estaba justificado un recorte de 0,5 puntos de los tipos de interés en la reunión actual [la de diciembre] y habrían favorecido que se estudiara más la posibilidad de una bajada más amplia”, recogen las actas del BCE, publicadas este jueves.
“Esos miembros destacaron el deterioro de las perspectivas económicas de la eurozona a lo largo de los sucesivos ejercicios de proyección y subrayaron que los riesgos para el crecimiento –en medio de muchas incertidumbres políticas mundiales y nacionales– son a la baja”, continúa este documento.
El Consejo de Gobierno lo conforman los gobernadores de los bancos centrales de cada uno de los socios del euro y los miembros del comité ejecutivo, que preside Christine Lagarde, en el que es vicepresidente Luis de Guindos y en el que participan también el economista jefe y otros vocales, como la alemana y principal referente de los 'halcones' (los más ortodoxos), Isabel Schnabel.
“Un recorte más amplio de los tipos de interés proporcionaría un seguro contra los riesgos a la baja para el crecimiento”, incidieron en diciembre algunos miembros de este Consejo de Gobierno, según las mismas actas. “Además, si la economía no se recuperara, aumentaría el riesgo de que la inflación no alcanzara el objetivo [teóricamente el 2%], lo que sugeriría que la política monetaria podría volverse demasiado restrictiva, con los tipos de interés todavía a cierta distancia de un nivel neutral”, prosiguen estas voces, aunque el documento no desvela de quiénes son exactamente.
Un nuevo recorte al final de eneroLas actas de la última reunión del BCE también incluyen que en el actual contexto de estancamiento de la actividad económica en la eurozona –con la excepción positiva de España–, el debate de diciembre “implicaba un nuevo recorte de los tipos de interés en enero [la próxima decisión es el día 31 de este mes]”.
Solo cuatro días después del último recorte de los tipos oficiales, el lunes 16 de diciembre, en un discurso en Lituania, la presidenta del BCE, Lagarde, recordó que la hoja de ruta es “seguir bajando los tipos de interés”.
Según han confirmado fuentes conocedoras a elDiario.es, de cara al año que ahora comienza, en el calendario del organismo hay cuatro recortes más del precio oficial del dinero de un cuarto de punto cada uno en los próximos meses, hasta dejarlos en el 2%.
Lo que no es seguro es si este es el suelo para este ciclo de alivio de las condiciones de financiación tras las fuertes subidas aprobadas para contener la sangría inflacionista que provocó la invasión de Ucrania. Hay dudas sobre si ese suelo estará más abajo. Y ahí es donde entra el debate sobre “el tipo de interés neutral”, la piedra filosofal de la política monetaria, según se explica en este reportaje.
De esta manera, el BCE sigue mejorando las condiciones de financiación “oficiales”, que se trasladan automáticamente al Euríbor, y por tanto suponen un abaratamiento de las hipotecas y de los préstamos en general, insuflando oxígeno a la actividad económica. Es decir, la institución sigue revirtiendo la austeridad monetaria que comenzó a ejecutar en 2022 para, precisamente, asfixiar la demanda y luchar así contra la inflación.
El ciclo de subidas de los tipos de interés comenzó en el -0,5% para la tasa de referencia y alcanzó el 4% en el otoño de 2023, donde se mantuvo hasta que el BCE empezó a dar marcha atrás antes del verano de este 2024, ante la evidencia de que las subidas de precios se habían moderado pasados los shocks de la crisis energética y de los cuellos de botella en el comercio mundial por la salida de la pandemia.
Desde entonces, la preocupación del Consejo de Gobierno de la institución ha ido virando desde la inflación, su principal mandato, al estancamiento de la economía del conjunto de la eurozona, principalmente por el frenazo de las dos principales economías de la UE.