El voto en contra del PP y Junts al decreto que, entre otras cosas, incluye la revalorización anual de las pensiones, también supone el adiós a las ayudas al transporte público que vienen dando un respiro a sus usuarios desde el despegue de la inflación, tras la invasión de Ucrania por Rusia que hizo dispararse los precios.

Analizamos qué ha pasado y qué supone para quienes utilizan de forma habitual el transporte público.

PP, Vox y Junts han dicho “no” en el Congreso de los Diputados al decreto de ley Ómnibus, aprobado por el Gobierno el pasado diciembre que, entre otras medidas, contemplaba rebajas en el precio del transporte público. En concreto, prorrogaba los descuentos que están en vigor desde 2022 y que iban a durar hasta el próximo 30 de junio.

Un rechazo que también deja caer otras medidas, como la revalorización de las pensiones o la prohibición del corte de suministros básicos a personas vulnerables.

Todas. A partir de mañana jueves el precio de los abonos mensuales y los que pagan, por ejemplo, los usuarios habituales de los Cercanías o Rodalies volverán a su precio normal, sin los descuentos que han ayudado en estos meses a unos 20 millones de personas. 

Lo que aprobó el Gobierno en diciembre fue dar continuidad, durante la primera mitad del año, a la gratuidad de los abonos de Renfe –Cercanías, Rodalies, Media Distancia convencional–, así como de las líneas de autobuses estatales. También, ayudas directas a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos para que redujeran en, al menos, un 50% el precio de los abonos y de los títulos multiviaje del transporte público colectivo urbano y metropolitano.

De estas últimas ayudas, el Estado financiaba un 30%, siempre que las comunidades y ayuntamientos se hiciesen cargo del resto hasta alcanzar ese mínimo de rebaja del 50%. Unos descuentos que, solo para la primera mitad del año, iban a suponer al Estado una inversión de más de 1.608 millones de euros.

También decaen las ayudas para los descuentos para los servicios públicos de bicicleta.

Las ayudas y descuentos estaban previstos para la primera mitad del año, por lo que en lo que va de mes de enero los usuarios del transporte público ya han ido adquiriendo títulos de transporte con descuentos. Es decir, esos títulos de Renfe adquiridos hasta hoy seguirán siendo válidos, porque tienen validez para el primer cuatrimestre de 2025, aunque en los abonos autonómicos y locales habrá que ver qué dice cada administración. No ocurre lo mismo con los que se comercialicen a partir de mañana, donde ya no se aplicará ningún tipo de descuento porque decae la financiación estatal.

En cuanto a cuál será el precio, está por ver, porque este irá en función del transporte público que se utilice, la Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento que sea. El precio será diferente, ya que es fijado por la administración que corresponda. En el caso de la media distancia de Renfe, de Rodalies y Cercanías, el precio será el de los billetes sin descuento.

Respecto a casos concretos, los abonos gratuitos de Cercanías y Media Distancia ya emitidos se podrán seguir utilizando hasta que finalice su vigencia en abril. Mientras, los abonos Avant ya emitidos seguirán igualmente vigentes hasta que se consuman los billetes. Y los abonos gratuitos de las líneas de autobús estatal seguirán vigentes hasta abril, cuando finaliza su validez.

El voto en contra del PP, Vox y Junts a las ayudas al transporte público es criticado por el departamento que dirige Óscar Puente.

Se trata de una medida que “va en contra de la gente”, señalan fuentes del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. “Por culpa del PP y Junts, más de 20 millones de personas afectadas” dirán adiós a estas ayudas, recalcan. “No estamos ante un ataque del PP y de Junts a este Gobierno”, añaden. “Es un ataque directo a los ciudadanos” y “deben explicarlo”.