La ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, ha asegurado este viernes que "no corresponde caer en el alarmismo" respecto a la desaceleración de la economía española, ya que se espera que siga creciendo -aunque a menor ritmo- mientras no se produzca "una perturbación impredecible".
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Calviño ha reconocido que la economía española está muy abierta y no será inmune a una prolongación en el tiempo de las tensiones comerciales globales o a una ralentización mayor de la economía europea, pero ha insistido en que no cabe adoptar una posición catastrofista ni alarmista.
La ministra no ha querido confirmar si el Gobierno revisará a la baja su previsión de crecimiento económico para este año, fijada en el 2,2 %, aunque ha dicho que si hay que hacerlo se hará, pero siempre bajo un criterio de prudencia.
Sobre la actualización del cuadro macroeconómico que se está preparando, ha explicado que tendrá en cuenta la revisión a la baja de la serie histórica de PIB realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), así como los últimos datos económicos que se están recibiendo.
Preguntada por la influencia que la economía pueda tener en el votante después de que el PP haya pedido retrasar el debate electoral hasta que se conozcan los datos de paro de octubre, la ministra ha rechazado el uso electoral de una información estadística que es estacional.
En su opinión, los españoles "saben" que la economía española está creciendo de una manera más sólida y estable que en otros momentos de expansión y con una mayor capacidad de resistencia ante posibles perturbaciones.