El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, Jaime Vargas, dijo este domingo a Efe que está cerrado "totalmente el diálogo" con el Gobierno y que solo habrá conversaciones una vez llegue a Quito el multitudinario grupo de aborígenes que se sumó a las protestas contra las medidas gubernamentales.
"Hemos cerrado totalmente el diálogo con el Gobierno, no hay diálogo hasta llegar a la ciudad de Quito", indicó Vargas en momentos en que cientos de indígenas protestan en varias carreteras del país contra la elevación del coste de los combustibles y por otras exigencias.
Sin ofrecer detalles, el líder indígena comentó que desde el Gobierno "intentan conversar", pero que ellos no han contestado y siguen avanzando en su caminata hacia la capital.
Las protestas contra el Gobierno, en las que participaron transportistas y otros colectivos, comenzaron el pasado jueves por la eliminación de los subsidios al diésel y la gasolina conocida como "extra", la de mayor consumo en el país, en el marco de un acuerdo crediticio con el Fondo Monetario Internacional (FMI)
"Aquí no estamos para negociar a espaldas del pueblo. El pueblo se ha levantado y eso es lo que se va respetar", apuntó Vargas al reiterar que pretenden seguir avanzando hacia Quito para concentrar en la capital sus protestas contra el Gobierno.
Los indígenas prevén un ingreso masivo a Quito el próximo martes para sumarse, un día después, a una huelga nacional con los sindicatos y otros colectivos sociales en contra del Gobierno al que tildan de "neoliberal".
Las protestas estallaron el pasado jueves cuando entró en vigor la eliminación del subsidio a los combustibles, que derivó en un alza de 1,85 a 2,39 dólares en la gasolina "extra" (la más popular), y de 1,03 a 2,27 en la diésel premium.
Los transportistas paralizaron completamente sus actividades entre jueves y viernes, cuando anunciaron la suspensión de la medida, que se cumplió de manera parcial este fin de semana.
El sábado fue casi nula la presencia de autobuses, con excepción de los municipales, mientras que este domingo ha sido escasa. El servicio de taxis, por su lado, ha sido normal.
El sábado, en un encuentro con la prensa extranjera, el canciller ecuatoriano, José Valencia, reiteró la apertura del Gobierno al diálogo, pero sin posiciones de fuerza.
Consultado sobre los reclamos de los indígenas, comentó que el Gobierno liderado por Lenín Moreno "está siempre abierto" al diálogo con ese sector, con el que ha demostrado apertura desde el inicio de su Administración, en mayo de 2017.
"Esa misma línea de diálogo, consideración y de respeto al movimiento indígena se va a mantener", dijo el sábado cuando la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, la mayor organización de su tipo en el país, reiteró su "movilización indefinida" por la subida del precio de los combustibles, entre otros reclamos.
El ministro apuntó que el diálogo debe darse "sin posiciones de fuerza, sin violencia".
"Porque en eso sí no vamos a claudicar, el Estado ecuatoriano va a mantener el orden", subrayó.